Sin condiciones y sin distinción entre hijos, así se hereda en España
Un trabajo del catedrático en Sociología por la UMA Luis Ayuso aborda por primera vez la forma en la que las familias españolas gestionan las transferencias intergeneracionales entre sus allegados y sus expectativas
El patrimonio de los padres debe pasar a los hijos, sin condiciones y sin distinción entre ellos. El catedrático en Sociología por la UMA Luis ... Ayuso acaba de publicar los resultados de un trabajo de investigación, 'Herencias en la sociedad digital' que ha realizado gracias a la beca Leonardo que le concedió la Fundación BBVA hace un par de años.
Ayuso se proponía estudiar desde el enfoque de la nueva sociología económica la forma en la que las familias españolas gestionan las transferencias intergeneracionales entre sus allegados y sus expectativas. Ello supone tener en cuenta el marco legal sucesorio y el sistema de bienestar, las transferencias 'inter vivos' y 'post mortem' y, sobre todo, los elementos culturales y simbólicos que median este proceso social del que se tiene muy poca información.
Para abordar este análisis se organizaron cuatro grupos de discusión en País Vasco, Madrid, Cataluña y Galicia, y se realizaron cuatro entrevistas en profundidad a personas mayores de 75 años. El objetivo era arrojar luz a la diversidad de discursos existentes alrededor de esta realidad, sobre todo por referirse a aspectos de los que tradicionalmente no se suele hablar al relacionarse con el dinero y la muerte. «Por primera vez se tienen datos cuantitativos sobre la gestión de las herencias gracias a una encuesta nacional estadísticamente representativa a 1.127 personas mayores de 60 años. Hemos elegido este grupo de edad por existir más probabilidad de haber recibido una herencia, poder preguntarse sobre su gestión, así como haberse planteado qué hacer con su legado» destaca Ayuso.
Según el investigador de la UMA, no se puede entender el papel que juegan las herencias en la sociedad española actual sin conocer bien sus características familiares. «La generación de personas mayores de 60 años se caracteriza según nuestro estudio porque dos de cada tres (67%) tienen pareja estable con la que conviven, con 2,1 hijos de media y 2,5 hermanos; el 84% tiene también alguno sobrino/a. Se trata por tanto de generaciones con una red familiar significativa que aún no experimentan la reducción de dicha red debido al declive demográfico que vivirán las siguientes generaciones. Se observa, eso sí, un paulatino proceso de «nuclearización de la familia» por el que ésta tiende a girar sobre la pareja y los hijos, a diferencia del pasado, donde estaban más presentes los hermanos, sobrinos, abuelos y nietos en el día a día familiar».
De acuerdo con los resultados de la investigación, una amplia mayoría considera que independientemente de cómo sea la relación, el patrimonio de los padres debe pasar a sus hijos (88%), sin condiciones (67%) y sin distinciones entre ellos (83%).
El aumento de la esperanza de vida y los cambios en las relaciones familiares se vinculan con un nuevo enfoque individualista: un 57% descarta que deba ahorrar con el fin de dejar un patrimonio a sus hijos y una mayoría relativa prevé una vejez en su propia casa con apoyo de cuidadores, frente al 9% que espera vivir con algún hijo.
Aunque la mayoría está a favor de repartir la herencia tras su muerte, el estudio recoge formas de herencia en vida: el 51% afirma haber ayudado a sus hijos para salir de casa y un 37% había ayudado económicamente a sus hijos en el último año. Además, el 83% está a favor de proteger la herencia porque representa el esfuerzo de padres a hijos, y un 61% es partidario de eliminar el impuesto de sucesiones. No llega al 10% quienes refieren haber tenido algún conflicto familiar vinculado a una herencia, pero preguntados de forma indirecta, si conocen algún caso en su círculo familiar cercano, un 33% afirma que conoce alguno y un 12%, muchos.
Muy vinculado con esta cuestión, cada vez es más habitual que los bancos comercialicen las llamadas hipotecas inversas, dirigidas generalmente a intercambiar una propiedad por una paga mensual hasta el fallecimiento de la persona mayor. Dos de cada tres encuestados descartan recurrir a este producto bancario (67%), aunque hay un 11% a favor y un 14% que afirma que dependería de las circunstancias. En este caso no hay diferencias de opinión por clase social o sentimiento de soledad, lo más relevante es este caso es el hecho de tener o no hijos, siendo algo más favorables a esta fórmula aquellos que no tienen descendencia.
El destino principal del patrimonio heredado es sumamente importante para conocer la función económica que juegan las herencias. La respuesta que manifestaron los mayores de 60 años que habían recibido alguna herencia subrayaba la importancia que se le da a esta transferencia; un 44% aún mantenían toda a alguna parte de la misma, un 18% la había invertido, y un 14% había optado por repartirla entre la familia. El 7% afirmaba haberla gastado poco a poco, un 4% la invirtió en algo personal, en pagar deudas (4%), e incluso un 3% en darse un capricho.
Luis Ayuso Sánchez (Linares, Jaén, 1977) es catedrático de Sociología en la Universidad de Málaga. Ha sido director de Investigación del Centro de Investigaciones Sociológicas (marzo 2017 a julio 2018), y director de su curso de posgrado (2012-2018). En la Universidad de Málaga ha sido vicerrector adjunto de Personal Investigador y coordinador del máster en Sociología Aplicada. Actualmente es subdirector del Centro de Investigación Social Aplicada (CISA), coordinador de la Escuela de Doctorado de la Federación Española de Sociología, y presidente del grupo de Sociología de la Familia (FES).
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión