Un sueño profesional con el Unicaja

La alero de 21 años llegó a Málaga por una corazonada y convencida por unas amigas y ahora ya no quiere marcharse. «La primera vez que vi jugar al equipo vine con unas amigas de aquí a ver un partido. Me dijeron que querían ascender y me gustó el ambiente, la explosividad, la energía con la que jugaban...», recuerda. Aquel conjunto y la propia ciudad la cautivaron rápidamente. Tanto es así que aseguró: «Quiero dedicarme profesionalmente al baloncesto hasta que decida retirarme. No tengo prisa por sacarme la carrera porque quiero dedicarme a esto. Y ya en el futuro me gustaría abrir una clínica de fisioterapia y vivir en Málaga. Me he venido aquí y creo que ya no me voy a ir, espero que me queden muchos años más».

En el equipo del ascenso, fue una de las piezas clave y, en lo que llevamos de temporada, su progresión va in crescendo. Mirando las cifras del conjunto, destaca especialmente por tener los mejores porcentajes de acierto en triple (36%) y en tiros libres (92%) y es la quinta máxima anotadora pese a que no es tiradora. Además, para los que no la hayan visto jugar, disfruta con los 'no look passes' (pases sin mirar) que asegura que aprendió de Gema García.

Enamorada de la ciudad y fiel a sus convicciones. La primera, la de llegar a la élite nacional, algo que sueña desde que se inició en el mundo de la canasta, a los 9 años y gracias a una prima, que también jugaba. Masiá mide 1,82 y no es la más alta de su casa, pero sí la única deportista profesional. Su padre ronda los 2,00 metros, aunque nunca se dedicó al baloncesto, sino al fútbol, en sus ratos libres. Siguiendo su ejemplo, el primer deporte que practicó la cajista fue el fútbol, como portera, aunque cuando se rompió un hueso de la mano decidió dejarlo a un lado y meterse de lleno en el baloncesto.

Comenzó a destacar en el Picken Claret valenciano, en el que disputó tres campañas en la Liga 2 (desde júnior de segundo año) y una fase de ascenso a Liga 1, justo antes de recalar en el cuadro costasoleño. «Me costó mucho la decisión de bajar de categoría. Me daba miedo pensar que podía estancarme y que no valdría para esto, pero no me equivoqué. Vine aquí y es otro mundo. Trabajamos con un club con recursos, con entrenadores muy capacitados, instalaciones...». Deja entrever en su discurso que su presente en el Unicaja se asemeja más a la imagen del profesionalismo que desea.

Y es que asegura que toda su vida gira en torno al deporte. «Mucha gente no aprecia que esto es un trabajo. No tenemos vacaciones como tal, porque tenemos que cuidarnos y trabajar también para nosotras mismas», expone. Y añade: «Mis veranos son para entrenar y luego durante la temporada hacemos tenemos gimnasio y sesiones de pista y yo en mi caso no puedo pasar dos días seguidos sin hacer algo de deporte». Al igual que su compañera de equipo Conchi Satorre, también disfruta jugando al tenis, sale a correr cuando puede y se anima a probar cualquier deporte. Ya en el poco tiempo libre queda aprovecha para desarrollar algunas de sus aficiones, como leer, dibujar en casa o al aire libre, o sencillamente, pasar el tiempo con sus amigas. Eso sí, su prioridad es inamovible y además, ambiciosa ya a corto plazo: «Sí que creemos que podemos conseguir ese ascenso a Liga 1, porque no tenemos la presión de que hay que subir al ser nuestro primer año, pero al estar yendo bien las cosas, ahora no sólo queremos mantenernos, sino que queremos más».

–¿Qué estilo de música escucha más últimamente?

– Reggaetón.

–¿Qué libro recomendaría?

– 'Los ojos del alma'.

–Una película y una serie favoritas.

– 'Princesa por sorpresa' y 'Juegos de Tronos'.

–Un concierto al que le gustaría ir.

–Uno de Beret.

–¿Algún amuleto para competir?

–Me pongo la misma gomilla del pelo.

–¿Qué soñaba con ser de pequeña?

– Veterinaria.

–¿Alguna mascota?

– Sí, un perro, Bolli.

–Un segundo deporte. 

– El fútbol.

–Un referente deportivo.

– Iniesta y Alba Torrens.

–Un referente en el Unicaja masculino y femenino. 

– Gema García y Alberto Díaz.

–Algo por aprender.

– A tocar la guitarra.

–En 10 años estará...

–Con mi clínica de fisioterapia y viviendo en Málaga.