El Unicaja cierra la temporada con un cómodo triunfo ante el Bilbao

El partido comenzó con el Bilbao haciendo gala de la intensidad que ha caracterizado su juego durante toda la temporada. El Unicaja tardó en cogerle el aire al partido y eso le costó ir perdiendo durante los primeros cinco minutos de partidos. Demasiados errores defensivos y Balvin castigando los despistes defensivos de Gerun. Sin embargo, la rotación del banquillo cajista recuperó el mando del choque con una defensa más sólida y, sobre todo, más acierto desde la línea de tres. El lanzamiento exterior fue la mejor y casi única arma ofensiva del Unicaja, pero eso le bastó para cerrar el primer cuarto dominando con cuatro aciertos casi seguidos desde la línea de 6,75 de Adams y Brizuela (20-13).

Teniendo en cuenta la batería de pívots que tiene el Unicaja fue llamativo ver cómo Ejim era el único capaz de postear y fabricarse una canasta de espaldas al aro. Este ha sido uno de los aspectos más débiles del cuadro malagueño a lo largo de la temporada y la primera parte ante el Bilbao fue un buen ejemplo. La combinación entre Rousselle y Balvin, uno por fuera y otro por dentro, permitió al Bilbao apretar el choque (27-25, minuto 14). El checo dominaba por completo en el emparejamiento con Guerrero, lejos de la mejor versión que se le ha visto esta temporada.

Brizuela volvió a dar aire al Unicaja con sus triples en sus mejores minutos en esta fase final, pero su acierto no era correspondido con la solidez defensiva necesaria para aguantar la renta, así que el choque llegó igualado al descanso (42-29).

En la segunda parte, los dos equipos rivalizaron en errores, pero la mayor calidad individual del Unicaja fue apareciendo para ir decantando el choque. Si antes fue Brizuela, ahora era Adams el que anotaba una y otra vez desde la línea de tres. Casi el solo se bastó para poner a su equipo diez arriba 57-47 antes del último cuarto. Al contrario que en la primera parte, ahora la defensa sí daba el nivel deseado y forzaba malos lanzamientos de un Bilbao con pocos recursos y que sólo anotó 9 puntos en este cuarto.

El partido fue perdiendo intensidad, con el Unicaja dominando con cierta comodidad. Casimiro aprovechó para darle minutos al canterano Pablo Sánchez, que ha estado completando al equipo en la Fase Final. El choque había perdido ya interés. Aunque la renta malagueña no era demasiado grande, había poca tensión. Los triples de Brizuela y Waczynski terminaron por sentenciar el último partido de la temporada del Unicaja, que a la vez también fue el último de varios jugadores con la camiseta verde.