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Las viviendas turísticas siguen sumando frentes abiertos. A las nuevas prohibiciones en 43 barrios de Málaga considerados zonas saturadas y a la limitación de contar con un acceso al inmueble independiente y con servicios de luz, agua y gas propios, en el resto de distritos, ... se añade ahora la amenaza de un aumento de la presión fiscal. El acuerdo del PSOE y Sumar para establecer un IVA del 21% a las viviendas turísticas dentro de un nuevo paquete fiscal para 2025, cuya negociación se enredó anoche en el Congreso y cuya votación estaba sin terminar al cierre de esta edición, ha generado preocupación en el sector. La Asociación de Viviendas Turísticas de Andalucía (AVVA-Pro) considera que la imposición de este IVA «pone en riesgo la estabilidad de un sector clave para la economía andaluza y española».
El presidente de esta asociación, Juan Cubo, hace un llamamiento al Gobierno para abrir un diálogo en el que poder analizar las medidas que garanticen «un equilibrio fiscal, sin comprometer el empleo y la viabilidad de las empresas». Es más, apunta que «apostar por un turismo sostenible debe incluir condiciones que no penalicen a los actores que cumplen con la normativa y contribuyen al desarrollo económico y social de nuestra comunidad».
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En este sentido, advierten de que el IVA es un impuesto lineal que termina por repercutir en el cliente final, encareciendo la oferta respecto a otros destinos y afectando, por tanto, a su competitividad. Por ello, consideran que sería importante valorar otros modelos impositivos que «contemplan criterios diferenciados por diferentes variables, y que permiten mejorar el funcionamiento y la autorregulación del sector, fomentando prácticas y procedimientos más profesionalizados de actividad». Esta asociación se decanta por estos modelos alternativos al IVA a la vista de las experiencias desarrolladas en otros países y que «se han mostrado sensiblemente más equilibrados y eficaces».
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Pero, además, insta al Ejecutivo a fijar, en todo caso, un IVA reducido del 10% para las viviendas turísticas como en el conjunto del sector turístico. Cubo deja claro que los propietarios de estos inmuebles vacacionales ya pagan impuestos y explica que ahora mismo estas viviendas tributan al 100% sobre el IRPF. «Lo que no se paga en IVA se paga a través del Impuesto de la Renta. Es decir, la Agencia Tributaria no pierde nada a pesar de que a la opinión pública se le haga creer que como no pagamos IVA no pagamos impuestos. Es otro bulo que se extiende y que es mentira. De hecho, son las propias plataformas de alquiler vacacional las que comunican a Hacienda los ingresos obtenidos por las reservas formalizadas».
Sobre el por qué de un IVA del 21% cuando los hoteles y el resto de alojamientos están pagando un 10%, lo justifican en que «probablemente en el tramo del 10% la Agencia Tributaria saldría perdiendo y los propietarios saldrían ganando con esta medida. Un IVA al 21% es una aberración». Asimismo, recuerdan que «las viviendas turísticas cumplen con una legislación específica y contribuyen de manera importante al turismo y a la economía local» por lo que sugieren mantener un IVA reducido en el sector turístico para fomentar el empleo y asegurar la viabilidad de las empresas.
Apartamentos turísticos
En este mismo acuerdo, PSOE y Sumar extienden este gravamen del 21% a los apartamentos turísticos lo que ha hecho saltar a la patronal hotelera de la Costa del Sol (Aehcos), que agrupa también a los empresarios de apartamentos turísticos. Esta asociación manifiesta su rotunda oposición a esta medida y denuncia la confusión terminológica existente entre los denominados apartamentos turísticos (AT) u hoteles apartamentos (HA) y las viviendas de uso turístico (VUT).
El presidente de los hoteleros, José Luque, advierte de que «desde Aehcos llevamos mucho tiempo reclamando a la Administración una igualdad de condiciones entre todos los subsectores del ámbito del alojamiento turístico y concretamente habíamos reclamado la imposición del IVA a los alquileres de viviendas de uso turístico, ya que no están gravados por este impuesto, así como otra serie de medidas de tipo fiscal y laboral que sí han de soportar los alojamientos hoteleros y extrahoteleros para poder desarrollar la actividad. Lamentablemente, ahora nos encontramos con que la respuesta del Gobierno es el anuncio de incrementar al 21% el IVA a los pisos turísticos sin distinción». En la Costa del Sol son 970 los apartamentos turísticos que suman más de 63.400 plazas. Luque deja claro que «desde Aehcos aplaudimos, por tanto, el anuncio del Gobierno de gravar con IVA a todos aquellos que ejercen una actividad turística sin una contribución fiscal como sí llevan a cabo el resto de modalidades de alojamiento. Sin embargo, nos oponemos a una subida injustificada e indiscriminada a una modalidad de alojamiento que ya está reglada y gravada», concluyó.
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