El Puerto no espera la vuelta de los cruceros hasta el mes de septiembre

Y es que la mayoría de las navieras consideran que es mejor esperar, retrasando la vuelta entre finales de septiembre y noviembre. Entre ellas se encuentran Cunard, P&O Cruises, Princess, Scenic y Virgin. A las que ayer se sumó Royal Caribbean, que ya contempla la reanudación de los viajes por alta mar a partir del 15 de septiembre. También Norwegian Cruise Line Holdings, compañía que opera las marcas Norwegian Cruise, Oceania y Regent Seven Seas Cruises, ha anunciado la extensión de la suspensión de sus viajes incluyendo ahora las salidas entre 1 de agosto y el 30 de septiembre para sus tres marcas de cruceros.

De ahí que aunque en el Puerto hace apenas tres semanas había previstas nueve escalas en julio y agosto, los movimientos preventivos de las navieras han llevado al Puerto a aplazar la llegada de cruceros hasta septiembre, en el que en dicha fecha se mantenían 27 escalas, entrando ya el puerto en la otra temporada alta. Las esperanzas están puestas en los meses álgidos: octubre y noviembre.

Mientras tanto, las instalaciones portuarias están preparadas para atender la llegada de cualquier crucero con protocolos de seguridad para frenar el Covid-19. En este sentido, explicaron que las terminales de crucero han permanecido cerradas durante el estado de alarma y que los buques han sido atendidos a pie de muelle.

«Málaga fue uno de los primeros puertos en adaptar las medidas de prevención en el mes de marzo, antes del estado de alarma. Las terminales de crucero, implementaron protocolos de actuación específicos, entre los que destacan: información a los pasajeros, higienización de las instalaciones antes, durante y después de las escalas, utilización de equipos de protección individuales, y reserva de salas de evacuación y confinamiento de personas con sintomatología», precisaron.

Además de estas medidas, destacaron que «el Puerto de Málaga permanece atento a las directrices que se aprueben en este sentido, por parte de las instituciones competentes así como de los certificados y sellos de calidad y seguridad en los que se están trabajando para la tranquilidad de las navieras y sus pasajeros».

La incertidumbre viene de la mano de la crítica situación por la que atraviesan las compañías con los barcos amarrados desde marzo y haciendo frente al aluvión de cancelaciones, en un momento en que estaban inmersas en ambiciosos planes de construcción de nuevos barcos. La presentación del concurso de acreedores de Pullmantur, una de las navieras destacadas en Málaga y fija con base en este puerto, ha encendido las alarmas. La naviera ha señalado que «a pesar del gran progreso realizado por la compañía para lograr un cambio en 2019 y su gran compromiso y los mejores esfuerzos de sus empleados, los vientos en contra causados por la pandemia son demasiado fuertes para que Pullmantur los supere sin una reorganización», declaró la naviera, recordando que ya tenía cancelados los viajes hasta el 15 de noviembre de 2020.

Royal Caribbean Group, que tiene el 49% de la naviera, dijo que a los huéspedes que ya hayan reservado para navegar en Pullmantur se les ofrecerá la opción de navegar en otras marcas incluyendo Royal Caribbean International y Celebrity. En este sentido, Facua-Consumidores en Acción reclama a la administración turística competente que aclare si Pullmantur cuenta con un fondo de garantía suficiente para hacer frente a los reembolsos e indemnizaciones. Aseguran que podría llegar a ser más de 150.000 usuarios los que ya tendrían contratados viajes. Pullmantur movió en Málaga el año pasado 21.714 pasajeros en diez escalas con puerto base.