Declaran culpable al acusado de matar a golpes a su vecino de 76 años con una barra en Almáchar

Ya hay veredicto por el crimen a golpes con una barra de hierro que acabó con la vida de Joaquín, de 76 años, en Almáchar. El jurado popular, que lleva estudiando las pruebas del caso desde el lunes, ha declarado culpable a su vecino, de 36 años, de la muerte violenta del anciano, según ha podido saber SUR. No obstante, los miembros del tribunal popular han considerado probado que, aunque de manera desproporcionada, el procesado cometió el homicidio en legítima defensa, por lo que han reconocido esta circunstancia en su eximente incompleta, así como la atenuante de arrebato.

Los hechos, enjuiciados esta semana en la Audiencia Provincial de Málaga, ocurrieron la tarde del 28 de mayo de 2022. La Fiscalía, en su escrito de calificación inicial, señalaba que ambos habían tenido desavenencias previas y que, el día de autos, los dos coincidieron en un paraje que hacía de linde entre sus respectivas casas. Por motivos que se desconocen, de acuerdo con la tesis de la acusación pública, se inició una disputa entre ambos que terminó de manera trágica para el septuagenario.

Así, de acuerdo con el Ministerio Público, el procesado mantuvo un forcejeo con el perjudicado y, «con ánimo de acabar con su vida», le propinó al menos seis golpes en la cabeza con una barra metálica. De hecho, en la primera sesión del juicio, el fiscal, en su turno de alegaciones, aseguró ante el jurado que el cadáver del anciano fue hallado por un matrimonio vecino con la cabeza «prácticamente reventada».

La versión del acusado -al que declararon culpable este viernes- y su defensa apuntaba a que fue el perjudicado quien, de manera sorpresiva, atacó al procesado. «Salió de detrás de su furgoneta de golpe y se abalanzó sobre mí con la barra; yo me quedé bloqueado y le agarré de las manos», manifestó el encausado en la vista, asegurando que el forcejeo se produjo porque él intentaba esquivar la agresión de su vecino con el palo. En el transcurso del mismo, según mantuvo, ambos cayeron al suelo, haciéndolo el perjudicado de espaldas.

Para el jurado, tras analizar todas las pruebas, ha quedado probado que el acusado dio muerte a Joaquín asestándole varios golpes en la cabeza con la barra metálica. A pesar de reconocer que este actuó tras ser atacado, considera que su método de defensa fue desproporcionado y que era conocedor de que existía una alta probabilidad de arrebatar la vida a la víctima a consecuencia de la agresión con el palo de hierro, como finalmente sucedió. El septuagenario, que sufrió un traumatismo craneoencefálico grave y daños cerebrales severos por hemorragia, falleció prácticamente en el acto.

En este caso, la Fiscalía ha mantenido la petición de condena que solicitaba, de once años de cárcel, por el delito de homicidio. La acusación particular, ejercida por la letrada Estela Domínguez, que representa a la familia de Joaquín, pedía inicialmente 25 años de cárcel por asesinato. Tras conocerse la deliberación del jurado, ha rebajado su petición a 15 años. Una vez emitido el veredicto, toca esperar a que la Audiencia Provincial de Málaga fije la pena que finalmente se impondrá al procesado.

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