El clan que explotaba los fumaderos desmantelados en La Trinidad empleaba a menores para vender droga
La Policía Nacional recuperó 18 viviendas de la junta que habían sido okupados y convertidos en narcopisos
La operación sirvió para desactivar uno de los fumaderos de droga más activos de Málaga capital. Cinco días después de que se produjese una de las actuaciones más importantes contra el menudeo en la ciudad ... , aún siguen saliendo detalles a la luz. Este lunes, la Policía Nacional ha emitido un balance en el que detallan los resultados de la investigación. Además de las grandes cantidades de droga aprehendidas y las 18 viviendas de la Junta de Andalucía recuperadas (estaban okupadas), la intervención también ha permitido a los agentes confirmar que el clan familiar que había tras los fumaderos empleaba a menores de edad para vender droga.
Según la Policía Nacional, además de vender sustancias ilegales, estos menores involucrados en la trama también hacían funciones de custodios de la droga. Para ello, el clan también disponía de perros de raza potencialmente peligrosa que empleaban en la vigilancia de las instalaciones –y que fueron retirados de manos de la organización–.
El balance final de las operaciones es de doce personas detenidas por su presunta implicación en los delitos contra la salud pública, pertenencia a organización criminal y defraudación de fluido eléctrico; 18 inmuebles recuperados y centenares de dosis de droga intervenidas. En total, los agentes encontraron 244 papelinas de heroína, 144 de cocaína y 234 de cocaína base; 75 gramos de heroína en roca, nueve de cocaína en roca y 156 de hachís; siete kilogramos de marihuana; dos balanzas de precisión; 4.220 euros en efectivo y diverso utillaje auxiliar para la dosificación y el pesaje de las sustancias.
Los agentes practicaron registros en media docena de inmuebles dedicados a la distribución y almacén de la droga, así como en una séptima vivienda reservada para el consumo de los compradores, lugar en el que no se respetaban las medidas de seguridad contra el coronavirus.
Presión a los inquilinos legítimos
Según se ha comprobado en la investigación, la organización se había apropiado en su totalidad de dos bloques de viviendas, cuyos legítimos inquilinos habían dejado libres al sufrir presiones por parte del clan familiar. Para evitar ser descubiertos, los inmuebles ocupados eran utilizados para el desarrollo de la actividad ilícita de manera alterna, cambiándose el punto activo de venta cada cierto tiempo entre los distintos pisos.
Los agentes a cargo del caso (de la Comisarías de Distrito Oeste, con la colaboración de agentes de la Comisaría Centro de Málaga), averiguaron que el clan había implantado entre sus integrantes un reparto de funciones: venta de estupefacientes, labores de captación de clientes, vigilancia ante la probable presencia de la Policía, o incluso custodia de la droga y del dinero generado por la actividad ilícita.
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