Así reabrirán los parques de atracciones: menos aforo y nada de fotos con personajes

Las últimas publicaciones del Boletín Oficial del Estado (BOE) relativas a la fase 3, en el nuevo estadio de la desescalada, indican que estos establecimientos podrán recuperar su actividad. El aforo en el recinto estará limitado al 50% y al 33% en atracciones y lugares cerrados, que deberán exponer al público el aforo máximo de cada zona y asegurar dicho aforo.

En las instalaciones se deberán mantener los dos metros de distancia y para ello se facilitarán itinerarios que garanticen a los clientes la separación física y evitar el riesgo de formación de aglomeraciones.

En las atracciones se garantizara la distancia de seguridad interpersonal de dos metros entre clientes en las zonas de cola, embarque y desembarque a las atracciones, con marcas en el suelo, o mediante el uso de balizas, cartelería y señalización.

Los aseos deberán desinfectarse cada hora y las instalaciones al menos dos veces al día con especial atención a superficie de contacto frecuentes tales como atracciones, pomos de puertas, mostradores, suelos, teléfonos o grifos. Además los aseos deberán desinfectarse cada hora y el gel alcohólico deberá estar accesible a la entrada de cada servicio, atracción o actividad.

Las zonas comerciales, los restaurantes y los hoteles de estos recintos deberán cumplir con las condiciones y medidas de higiene establecidas en la fase 3 de la desescalada. En todos ellos se fomentará el pago con tarjeta u otros medios electrónicos contactless y la organización deberá fomentar la venta y reserva 'on line' de las entradas.

Este viernes el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo publicó en su página web siete nuevas guías con medidas higiénico-sanitarias para la reapertura segura del sector turístico, entre ellas se incluye la del sector de parques de atracciones y de ocio.

En esta guía se indica en lo referido a actuaciones y espectáculos que éstos deben diseñarse y planificarse de tal forma que permitan controlar los aforos y respetar la distancia mínima de seguridad entre personas, evitando la interacción física con los visitantes (photocall, pasacalles, caracterizaciones), a menos que se utilice mascarilla.

El impacto económico de la crisis del coronavirus (Covid-19) y la declaración del estado de alarma han impactado especialmente en los parques de atracciones españoles, que se han visto obligados a posponer el inicio de su temporada alta, al tiempo que debían seguir soportando importantes costes fijos para garantizar el mantenimiento de sus instalaciones.

En estos momentos todos ellos ya disponen de planes de reapertura y protocolos operativos adaptados a la nueva normalidad, pero solicitan al Gobierno más apoyo económico y laboral para operar en la 'nueva normalidad'.

Así, solicitan medidas tales como la extensión de la duración de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor hasta final de año, la exoneración del abono de la cuota de la Seguridad Social durante ese período, la habilitación de una línea especial de financiación o la concesión de ayudas estatales directas al sector similar a las aprobadas para otras empresas turísticas y culturales.

Desde la Asociación Española de Parques de Atracciones y Temáticos (AEPA) se recuerda que los parques de atracciones forman parte de la cadena de valor del turismo, ya que en muchas ocasiones son el origen de la planificación de un viaje que genera una gran actividad económica (transporte, hoteles, restaurantes).

Por ello reclaman la recuperación del tipo reducido del IVA del 10%, al igual que tienen otros sectores turísticos o culturales, que les permita acometer inversiones y ponerse al nivel de otros competidores europeos.

Las previsiones de apertura en España se sitúan en el entorno de comienzos o mediados de julio, en función de cómo evolucione la desescalada en los diferentes territorios, aunque con grandes pérdidas previstas para esta temporada que no se compensarán con la esperada llegada de visitantes este año, sobre todo nacionales.

«Al agujero económico que supone la pérdida de facturación durante los meses en los que no hemos abierto hay que añadirle la dificultad que vamos a tener en la captación de público durante los meses que abrimos, tanto por la restricción de movilidad nacional como internacional», indica a Europa Press el presidente de la AEPA, Guillermo Cruz.

Además los parques tendrán que asumir un gasto extraordinario en medidas de protección sanitarias para proteger a sus clientes y trabajadores entre las que se incluyen geles, mascarillas, productos desinfectantes, refuerzos de limpieza o señalización especial.

Lo más importante para los parques es establecer protocolos sanitarios adecuados para minimizar el riesgo del contagio del virus, algo que consideran que pueden cumplir apoyados en que la mayoría de ellos tienen gran parte de sus instalaciones en espacios al aire libre.

«Esta claro que en un parque temático no hay muchísimo más riesgo que el que podamos correr en la calle y por supuesto hay muchas más medidas preventivas y de seguridad que en cualquier otro sitio», aseguran desde la Asociación, que se siente en la «obligación moral» de contribuir a la vuelta a la normalidad del país.

De momento, los únicos parques que españoles que tienen marcada posible fecha de reapertura son el parque temático de Toledo Puy Du Fou y el zoo de Barcelona. El primero ha fijado su regreso para el 18 de julio y el segundo aunque no determina fecha de apertura, ofrece campamentos para los niños a partir del 29 de junio. Isla Mágica en Sevilla también podría abrir en la primera semana de julio, con obligatoriedad de mascarillas incluso en las atracciones.

Teniendo en cuenta que la vuelta a la normalidad está directamente vinculada con el cambio de fase, otros grandes parques españoles como PortAventura, Parque Warner o el Parque de Atracciones de Madrid aún continúan sin fecha para poner en marcha sus montañas rusas que podrían entrar en funcionamiento en cuanto las autoridades lo permitan.