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El grupo de activistas españoles, británicos e italianos, camino a Glasgow, en una parada. R.C.
El largo camino a pie de los activistas climáticos españoles hasta Glasgow

El largo camino a pie de los activistas climáticos españoles hasta Glasgow

Miembros de Ecologistas en Acción y Extintion Rebellion andan por los arcenes británicos para protestar en la próxima Cumbre del Clima

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Lunes, 25 de octubre 2021, 01:29

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La campiña inglesa es larga y ajena. Más al borde de la carretera con un cielo gris, como el que acompañó esta semana a un grupo de activistas climáticos, que llevan casi un mes caminando campo a través por el Reino Unido. La marcha, liderada por un grupo de españoles, se propone llegar a Glasgow, ciudad convertida en sede de la nueva Cumbre del Clima, la COP26 que sigue a la celebrada en Madrid. Allí, aseguran, harán oír su voz desencantada a los líderes mundiales, responsables de la inacción política ante el cambio del clima.

La idea se gestó hace dos años cuando José Luis Martínez, un jubilado de 67 años y miembro de Ecologistas en Acción, decidió organizar esta protesta silente, que se pospuso un año por la pandemia. «Soy el instigador», reconoce. «La COP de Madrid dejó mucho malestar por la falta de acuerdos. Al principio de este año planificamos 29 etapas para atravesar mil kilómetros. La gente se va sumando, a veces cuatro personas, otros días cien».

El grupo, también formado por italianos y británicos, salió del Puerto de Portsmouth, en el sur de la isla, y han pisado Oxford, Winchester, Leeds o Sheffield, entre otras localidades, trazando «una línea vertical», describe Martínez, por teléfono, en plena andadura y a punto de llegar al lugar donde pernoctará después de recorrer unos 35 kilómetros diarios de promedio. «No hay nada en medio de los centros urbanos, es un territorio vacío con poca población», describe el organizador, que vive en Zaragoza. «Llegaremos el día 29 a un cruce donde nos uniremos con otra marcha que viene del oeste, y entraremos juntos a la ciudad la víspera del comienzo de la cumbre».

Caminan sin desánimo, en una fila por un arcén de carretera. Algunos van con chalecos reflectantes, otros con bastones de alpinismo y alguno lleva su bandera amarrada a un largo bordón. «Lo mejor es el apoyo y el cariño de la gente local, y lo peor, lo mal preparado que está el país para el peatón», expone Carlos Buj, educador ambiental de 39 años y activista de Extintion Rebellion, cuyo capítulo español también encabeza la marcha. «Esperamos contribuir a centrar el debate público en la mayor crisis de la historia de la humanidad... la crisis climática y ecológica».

Festivo pero crítico

A punto de entrar en Escocia, ya han celebrado encuentros con otros activistas locales y con autoridades municipales, asegura Martínez, y han contado con la ayuda de los británicos. «Nos alojan en casas e iglesias, donde podemos colocar las esterillas y los sacos de dormir», dice Martínez.

Los días son distintos. Algunos apacibles, otros «complicados, como el del domingo pasado, que atendimos la invitación de un alcalde al norte de Yorkshire. El acto se prolongó hasta pasado el mediodía, y después caminamos seis horas. Llegamos a nuestro destino muy tarde».

En estas paradas, los españoles intercambian impresiones con los activistas de otros países. Consideran que el tema más importante es concretar cómo será el mercado de emisiones de gases de efecto invernadero y dar un «impulso radical» a la exigencia ciudadana de cumplir los Acuerdos de París, para que el calentamiento global no supere los 1,5 grados –aunque los científicos ya estiman que no bajará de 2 grados, con suerte–.

A pesar del cansancio, existe un «tono festivo», dice Martínez. «Lo tratamos de mantener para respirar optimismo, pero estamos muy preocupados y prevalece la opinión crítica sobre la irresponsabilidad de los Gobiernos, que se rigen por políticas de corto plazo que atentan contra el futuro de nuestros hijos y nietos».

En Glasgow esperan una «gran recepción». Los grupos ecologistas que se han citado en la ciudad tienen programadas actividades dentro del marco de la COP26, durante una semana. «Además tenemos aliados dentro de la cumbre que llevará nuestra voz a las sesiones», dice Martínez, que sin embargo no esperará hasta entonces. Regresará a España lo antes posible para participar en la movilización por el clima convocada el día 6 de noviembre. «Hay que empujar por acuerdos satisfactorios», dice.

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