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Martín Mena es el autor del cartel oficial de la Semana Santa de Málaga de 2025. Sur
Martín Mena: «Mi cartel para la Semana Santa de Málaga es muy poético; es una reflexión íntima»
Entrevista

Martín Mena: «Mi cartel para la Semana Santa de Málaga es muy poético; es una reflexión íntima»

El pintor es el autor de la obra que anunciará los desfiles procesionales de 2025, que se dará a conocer este jueves, en el Cine Albéniz

Miércoles, 8 de enero 2025, 00:23

El primer acto cofrade del año de especial relevancia es la presentación del cartel oficial de la Semana Santa, que, desde el año pasado, se celebra en el cine Albéniz, después de que el teatro Echegaray, que ha venido acogiendo este evento desde 2016, se quedara pequeño ante la gran demanda de personas, autoridades y patrocinadores que quieren ver la obra 'in situ'.

La presentación del cartel, editado por la Agrupación de Cofradías, marca la cuenta atrás hacia la cuaresma y la Semana Santa. La pintura que servirá para anunciar el rito procesionista de este Año Jubilar de 2025 se debe a Juan Miguel Martín Mena, nacido en Cádiz en 1979, «aunque de forma accidental», recalca el artista, ya que su familia es de la localidad sevillana de Dos Hermanas, «y nazareno me considero», comenta con orgullo. «Nací en Cádiz, porque mi tío era pediatra allí y mis padres quisieron que él estuviera en el parto, pero a los cuatro días nos vinimos para Dos Hermanas», recuerda Martín Mena, uno de los pintores más demandados por la clientela cofrade, no en vano, tiene repartidas obras por toda Andalucía y es autor de los carteles oficiales de la Semana Santa de Córdoba (2021) y Almería (2022). También realizó el del centenario de la coronación canónica de la Virgen del Rocío de Almonte en 2018 y, en Málaga, son conocidos sus carteles para las cofradías del Cautivo y Sagrada Cena, ambos de 2020, y su pintura para El Rico, en 2024, con motivo de una exposición colectiva por el centenario de la advocación de la Virgen del Amor.

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El cofrade e investigador madrileño Enrique Guevara, afincado en Andalucía, a caballo entre Sevilla y Málaga, será el encargado de dar a conocer la obra de Martín Mena durante un acto que se desarrollará este jueves, 9 de enero, a las 20 horas, y estará conducido por Raquel Espejo, recién nombrada archivera de la Agrupación de Cofradías, tras el fallecimiento de Trinidad García-Herrera, y presentadora del espacio Guion, en 101 Televisión.

Como de costumbre, Diario SUR ofrecerá a sus lectores este domingo, 12 de enero, de forma gratuita, junto con el ejemplar del periódico, el cartel de la Semana Santa de Málaga de 2025.

-A pocas horas de que vea la luz el cartel oficial de la Semana Santa de Málaga, imagino que tendrá muchas ganas de que se descubra la obra.

-Tengo muchísimas ganas. Una vez que se termina la obra, lo que quiere uno es compartirla con todo el mundo.

-¿Y cómo andamos de nervios?

-Estoy muy nervioso. La experiencia te ayuda a canalizarlos, pero nervios siempre hay. El pellizco en el estómago existe y el día que no lo tenga será el día que me tendré que plantear dedicarme a otra cosa.

-¿Conoce cómo es el acto de presentación del cartel de la Semana Santa de Málaga? No es por ponerlo más nervioso, pero se celebra en un teatro, con una puesta en escena diferente a lo acostumbrado en otras localidades andaluzas.

-Sí, sí, lo conozco. La Agrupación de Cofradías lo hace muy bien. La puesta en escena es preciosa. Le da mucha importancia a la obra. Estoy encantado con ese tipo de formato.

-Me comentan que Gonzalo Otalecu, director del Museo de la Semana Santa de Málaga 'Jesús Castellanos', ha sido su principal valedor para que usted sea el cartelista de la Semana Santa de Málaga. De hecho, fue él quien lo llamó para que viajara a Málaga para que el presidente de la Agrupación le diera la noticia. ¿Se conocían?

-Teníamos algunos amigos en común y hemos coincidido alguna vez, pero en ese momento no teníamos amistad. A raíz del nombramiento, ya sí me une un lazo de amistad, tanto con él como con Gonzalo León, responsable de Comunicación de la Agrupación de Cofradías.

-¿Qué le pasó por la cabeza cuando vino a Málaga y el presidente de la Agrupación, José Carlos Garín, le ofreció el cartel de la Semana Santa de 2025?

-Me quedé completamente en estado de shock. Fui a Málaga pensando que me ofrecían otros proyectos, en concreto, para una posible exposición. Me tuvieron medio engañado toda la mañana hasta que el presidente me dijo que el motivo era el ofrecimiento del cartel oficial de la Semana Santa de Málaga.

«Hacer el cartel de la Semana Santa de Málaga es para mí un regalo»

-¿Dijo «sí», de inmediato, o se lo pensó?

-Dije «sí», por supuesto. Luego te planteas el planning y otras muchas cosas, pero en ese momento solo te sale el sí. Hacer el cartel de la Semana Santa de Málaga es para mí un regalo.

-Usted ya hizo los carteles oficiales de Córdoba y Almería, y en Málaga ya había tenido oportunidad de mostrar su obra. ¿Soñaba con el cartel de la Semana Santa malagueña?

-Lógicamente, me dedico a la cartelería y, por consiguiente, estoy todo el año esperando la llamada de las diferentes cofradías, agrupaciones y consejos de hermandades, pero, a decir verdad, no me planteo una en particular. También le digo que ni muchísimo menos me esperaba una Semana Santa tan importante como Málaga.

Martín Mena, con el nombramiento de pintor de la Semana Santa de Málaga. Sur

-¿Conoce la Semana Santa de Málaga?

-No de forma presencial, pero sí la conozco, claro que sí. Las redes sociales, las fotografías y las televisiones te dan la posibilidad, hoy día, de conocerla, aunque no hayas estado. Y, en concreto, la de Málaga la conozco de siempre, porque mis abuelos maternos son malagueños. En casa siempre hemos vivido la Semana Santa de Málaga, aunque sea desde la distancia, a través de la televisión o de la radio. Mi familia siempre ha tenido un cariño especial a la Semana Santa malagueña. Además, yo soy cofrade y me gusta la Semana Santa de toda Andalucía. A partir del encargo, he profundizado en las cofradías de Málaga, en el ambiente y en todo lo que se mueve alrededor de su Semana Santa.

-Ha tenido que hacer un estudio de campo importante, supongo, porque la Semana Santa malagueña tiene muchos matices.

-Para mí, la documentación e información son esenciales en el proceso de ejecución de cualquier cartel. En el caso de Málaga, hablamos de una de las semanas santas más importantes a la que tenía que conocer al dedillo. Han sido meses de investigación, porque, aparte de lo que puedas ver, leer y estudiar, lo importante está en cómo se vive y el carácter del cofrade malagueño. Esto se investiga a través de charlas encubiertas, por supuesto, sin poder decir para qué es. Que no se note mucho que estás sacando información. He intentado 'empaparme' de todo al máximo. He invertido bastante tiempo en el estudio de la Semana Santa de Málaga, como en plantear la obra. He estado un par de meses captando información, sin tener todavía ideas concretas, porque quería conocer bien la Semana Santa de Málaga.

-Finalizada la fase de estudio, ¿barajó muchas ideas antes de decantarse por la obra definitiva?

-En realidad, ha habido tres opciones, tres caminos a seguir, pero rápidamente se descartaron dos y me quedé con la primera idea. El primer 'flashazo' que me rondó por la cabeza fue la opción que escogí, tanto compositivamente, como por contenido y otros aspectos que se estudian minuciosamente pensando en muchos factores.

-Habla en plural. ¿Los descartes los hizo con más personas?

-Este tipo de cartel no se comentan con muchísimas personas. Todo lo contrario. En casa saben a lo que me dedico y no comento mucho. Tanto Gonzalo León como Gonzalo Otalecu me han servido de consejeros, porque yo me hacía muchas preguntas que se quedaban en el aire y ellos han sido los que, rápidamente, me han ido contestando, pero, en ningún momento, les he pedido opinión a la hora de tomar decisiones. Han sido decisiones personales y esto debe ser así para que te quedes tranquilo y que la obra sea personal.

-En este momento de estudio, ¿ha tenido la oportunidad de conocer todos los carteles oficiales que se han editado con motivo de la Semana Santa de Málaga?

-Sí, por supuesto. Soy un amante de la cartelería y la mayoría de los carteles me sonaban, porque la Semana Santa de Málaga, precisamente, siempre ha sido famosa por su cartel.

-Y de todos ellos, ¿con cuál se quedaría?

-Pues yo me quedo con el mío (risas). Bromas aparte, hay bastantes que me fascinan de las décadas de los 40 y 50 del siglo pasado.

-¿Cómo fue su entrada en Málaga?

-Fíjese qué entrada: por medio de la Cofradía del Cautivo. Hice su cartel en 2020. Fue una experiencia fantástica. Me trataron de forma formidable. Entrar en Málaga para tratar la devoción del Cautivo es muy gratificante. Me conocieron a través de las redes sociales, como casi todos mis clientes de hoy en día. Luego, hice el cartel del cincuentenario del Señor de la Cena y la Virgen de la Paz, también en 2020. Igualmente, fue una experiencia maravillosa. Y este último año tuve la oportunidad de colaborar con la Cofradía de El Rico para una exposición por el centenario de la advocación de la Virgen del Amor.

Carteles de Martín Mena para las cofradías malagueñas del Cautivo y Cena. Sur

-Volviendo al cartel de la Semana Santa de Málaga, ¿cuándo lo terminó?

-Hace poquito. En las vísperas de la Navidad. Es cierto que el cartel en sí lo terminé en noviembre, pero a mí me gusta dejar reposar la obra, contemplarla. He estado retocando el cartel hasta que ya no podía más. Tocaba barnizarlo y enmarcarlo. Siempre hay matices, cositas que hay que retocar o añadir. Me gusta ese tiempo de maduración.

-Se hicieron famosas sus obras realizadas a bolígrafo, aunque para la cartelería cofrade también emplea otras técnicas. ¿Ha utilizado el bolígrafo en el cartel de la Semana Santa de Málaga?

-Le puedo adelantar que hay un pequeño toque de bolígrafo, pero muy pequeño. Es la técnica que he usado en estos últimos años. Hay gratito, acrílico, acuarela, bolígrafo... El bolígrafo es, simplemente, una técnica más de las que utilizo para mis obras. Todo tiene un proceso, un orden y un concierto. No cojo un bolígrafo por cogerlo.

-Pero el bolígrafo no se puede borrar. ¿Ha tenido que repetir la obra?

-El bolígrafo tiene sus particularidades y hay que ir muy seguro, porque no se puede borrar. Alguna vez he tenido que repetir, pero en el cartel de Málaga, no. Gracias a Dios, ha ido todo sobre ruedas. Algunas fases han sido más largas de la cuenta, otras, sin embargo, han ido más rápidas.

-¿Cuántos meses ha durado el proceso de realización de la obra?

-La pintura, la definitiva, unos dos meses. Empecé en octubre. Eso sí, con anterioridad, hice muchas pruebas. El definitivo es casi lo de menos. El trabajo real está en todas esas pruebas. Además, yo tengo una técnicas que es a base de aguadas, veladuras y demás, en las que tienes que controlar cosas incontrolables como una mancha de agua, como una veladura de acuarela, que la mancha se mueve sola. Entonces, todo eso tienes que ensayarlo sin tener la seguridad de que te va a funcionar luego. Puedes hacer una mancha de acuarela y es imposible imitarla, intentar repetirla igual. Todo eso influye mucho. Hay que trabajar la obra mucho para tener la idea muy clara y que en la definitiva no te lleves sustos.

-¿Qué formato tiene el cartel?

-Es pequeño para lo que se suele hacer en Málaga. No es un formato de los más grandes, ni mucho menos.

-Sus carteles suelen ser composiciones e incluye muchos elementos. Una imagen principal, que, generalmente, está desprovista de trono o paso, y otras secundarias, así como otros elementos identificativos del lugar, ya sea a través de la arquitectura o monumentos. ¿Será el caso de Málaga o ha querido romper moldes en esta obra?

-Siempre digo que soy un pintor más devocional que de calle, pero esto no quiere decir absolutamente nada en este caso.

-O sea, que va romper el molde en el cartel de la Semana Santa de Málaga.

-O no, o sí, quién sabe (risas). No puedo adelantarle nada.

-No cejo en el empeño. ¿Cómo describiría el cartel que ha pintado sin decirnos cómo es?

-Es un anuncio... Hay un mensaje, pero no puedo revelarlo. Quiero que sea una sorpresa.

-¿Está dedicado a alguien?

-Aunque sea cartelería cofrade y detrás haya un encargo, aprovecho para derramar una parte íntima en cada una de mis obras. Las circunstancias y las personas que te rodean siempre influyen. Sí le puedo decir que en el cartel de Málaga he hecho un ejercicio muy íntimo. El cartel de la Semana Santa de Málaga es una reflexión íntima; es un cartel muy poético, es una poesía interior mía.

-Supongo que varios responsables de la Agrupación de Cofradías de Málaga y el presentador del cartel, Enrique Guevara, ya han visto la obra. ¿Qué le han dicho?

-Después de ver sus caras, estoy bastante tranquilo. Vinieron a ver la obra a mi estudio y me dejaron muy tranquilo.

-Usted es autodidacta, ¿no es así?

-Digamos que sí, me considero autodidacta. He gestionado mi formación.

-¿Se dedica exclusivamente a la pintura o la compagina con otra profesión?

-Sí, sí, completamente. Me dedico exclusivamente a la pintura y, específicamente, a la cartelería.

-Entonces, me confirma que se puede vivir de la cartelería.

-Siempre digo que soy un afortunado por poder dedicarme a esta profesión. En su momento, tuve el valor de arriesgarme, dejando mi trabajo estable para dedicarme a la cartelería. Hombre, es un oficio con el que no te vas a hacer millonario, pero te da la satisfacción de desarrollar tu inquietud artística. Hay mucha gente haciendo cosas muy buenas y claro que es difícil dedicarse a esto, pero ahí estamos. Hay que trabajar mucho. Yo reivindico siempre que hay que tomarse esta profesión en serio. Cualquiera no puede ser cartelista. Y no lo digo por las habilidades que puedas tener, pero también hay que tomárselo en serio. Detrás de cada cartel hay muchas horas de estudio, mucho trabajo que nadie ve... Yo me tomo muy, muy enserio esta profesión. Invierto muchas horas que, quizá, me las podía ahorrar siguiendo otros métodos y otra actitud, pero creo que, precisamente, si mi trabajo convence es porque es de verdad. Pienso que es el éxito de mi obra y por eso me puedo dedicar a la cartelería y mi teléfono sigue sonando.

«No vale todo en la cartelería cofrade; tiene que haber un lenguaje común y un mensaje claro»

-Vamos ahora a por el cartel de la Semana Santa de Sevilla, ¿no? Como sevillano que es, aunque nacido en Cádiz, imagino que le ilusionaría.

-Bueno, no tengo metas. Estoy muy contento por haber realizado el cartel de la Semana Santa de Málaga. Esto es un sueño que no me podía imaginar. Era inalcanzable, y, ahora, toca disfrutar esto que estoy viviendo. Ahora toca la parte más bonita: compartirlo.

-No es por insistir, pero podría darse el caso de que hiciera primero el cartel de Málaga y luego, el de Sevilla, al contrario de lo que le sucedió al malagueño Raúl Berzosa, que primero pintó el cartel de Sevilla en 2015 y dos años más tarde realizó el de su ciudad.

-Mi teléfono, mi agenda y mi caballete están siempre abiertos y esperando cualquier tipo de cartel. Todos me los tomo igual de serio y me hacen la misma ilusión.

-¿En la cartelería cofrade vale todo?

-Por supuesto que no vale todo. Tú estás trabajando para un cliente; es una obra personal, no particular. Como decía antes, puede haber una carga personal muy grande en la que reflejas ciertas inquietudes personales camufladas, pero es algo que tú haces para dos clientes: el que te lo encarga y te paga, y el que lo consume. Por tanto, tiene que existir un lenguaje común, tiene que haber un mensaje claro y una idea que se pueda compartir.

-¿Teme a la crítica?

-Temo a la crítica buena. En cambio, intento que no me afecte la crítica que se da en redes sociales, tanto si es positiva como negativa. Gracias a Dios, puedo decir que me suelen tratar muy bien. No he sufrido ataques con ningún trabajo. Espero que la gente se haga con el cartel, lo sienta suyo y respeten mi trabajo.

-¿Cómo ve la Semana Santa de Málaga?

-La Semana Santa de Málaga es un gran espectáculo. Soy cofrade y voy conociendo cada año diferentes puntos de Andalucía, gracias a esta profesión, y la de Málaga es la gran puesta en escena; es colosal.

-¿Vendrá a vivirla este año?

-Sí, espero ir a Málaga este año. Voy a intentar estar en Málaga el máximo de días, quitando el Domingo de Ramos, ya que soy hermano mayor de la Estrella de Dos Hermanas y salgo con mi hermandad.

-Qué es lo que más le llama la atención de la Semana Santa de Málaga?

-Como sevillano que soy, me llama la atención las diferencias que hay entre una Semana Santa y otra. Las diferencias que hay entre un paso en la calle y un trono llaman la atención. La forma de llevar un trono, las dimensiones. Y también me quedo con el ambiente cofrade que he descubierto durante este proceso; la naturaleza del cofrade malagueño, que es una persona completamente abierta y cercana. Hay un ambiente alrededor que me ha sorprendido. Me he sentido muy a gusto. Málaga disfruta de las cosas sin complejo.

-¿Qué color define la Semana Santa de Málaga?

-Hay muchos. La Semana Santa es la explosión de la primavera. Por tanto, no puede faltar el azul del cielo, o el oro. Málaga es una paleta de colores alegres más que oscuros. Lógicamente, hay hermandades de luto, sobrias, pero en Málaga gana la alegría.

-¿Qué imagen de la Semana Santa malagueña destacaría a nivel devocional, primero, y a nivel artístico, después?

-Pregunta complicada. No me puedo mojar. Málaga cuenta con una imaginería maravillosa, tanto antigua como de nueva factura. Hay imágenes que impactan, tanto de Cristo como de Virgen. Qué decir de esa devoción popular de Jesús Cautivo con esa puesta en escena con esa túnica volando cuando camina. O esa talla nueva, como el Cristo de la Humildad y Paciencia, tan impactante que, en tan poco tiempo, se ha ganado a la gente. Le hablo de la diversidad de la imaginería de la Semana Santa malagueña. En Málaga hay verdaderos iconos. Imágenes que desde lejos, por una silueta, por una prenda o algún elemento que lleve, son icónicas. Esto lo ha hecho el pueblo. Esto no lo ha diseñado nadie ni ha habido una intención.

-Para terminar, este 2025 empieza con el cartel de la Semana Santa de Málaga y seguirá con el de la Hermandad del Rocío de Almonte.

-Pues sí, he terminado el de Málaga y ya estoy trabajando en el cartel del Rocío. Además, soy muy cofrade, pero también, muy rociero. El 2025 ha venido cargadito de cosas muy bonitas. Sé lo importante que son ambos trabajos. Así que estoy muy contento y con la responsabilidad asumida.

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