El merchandising supone un 30% de las ganancias de Angry Birds

Rovio, creadores del fenómeno Angry Birds, acaba de lanzar las cuentas de su año fiscal 2011; unas cuentas que marean, sobre todo si pensamos que la inversión necesaria para crear un producto como Angry Birds es mínima. La compañía finesa obtuvo unos ingresos brutos de 75,4 millones de euros, de los cuales 48 millones son beneficios netos; pero lo curioso es que un 30% de la cifra de ingresos proviene del merchandising y de licencias a terceras empresas.

Esto demuestra que hay todavía muchas opciones de mercado por explorar en el mundo de los videojuegos. Centrémonos por un momento en el merchandising de juegos (y dejando aparte otras ideas de mercado de las que ya hemos hablado en otras ocasiones): sabemos que, obviamente, no es un fenómeno nuevo, pero no se trata ni de lejos de algo tan generalizado como el del cine. La venta de objetos de coleccionista basados en películas mueve cifras astronómicas: por ejemplo, así se hizo rico George Lucas (que cedió a la productora la taquilla de Star Wars pero se quedó con el merchandising, por entonces un negocio residual).