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EDICIÓN IMPRESA

Principio de acuerdo sobre la composición de la gestora del Ayuntamiento de Marbella

A última hora de la noche se conocía la noticia de que los dirigentes políticos habían llegado a un principio de acuerdo sobre la constitución de la gestora que dirigirá la localidad. El reparto era el siguiente: seis miembros del PSOE, seis del PP, dos de IU y otros dos del PA

HÉCTOR BARBOTTA

Sábado, 8 de abril 2006, 02:00

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Ni los más optimistas esperaban un entendimiento tan rápido entre los partidos políticos que deben decidir la composición de la gestora del Ayuntamiento de Marbella después de que el Consejo de Ministros acordara ayer la disolución de la actual corporación municipal. A última hora de la noche se conocía la noticia de que los dirigentes políticos habían llegado a un principio de acuerdo sobre la constitución de la gestora que dirigirá la localidad. El reparto era el siguiente: seis miembros del PSOE, seis del PP, dos de IU y otros dos del PA.

Según confirmaron fuentes de estos partidos, los contactos se intensificaron durante toda la tarde de ayer y finalmente se llegó a este acercamiento «que podría ser pulido, concretado o ratificado» en las reuniones previstas para hoy en la Diputación Provincial, órgano que debe decidir la formación de esta comisión.

«Esta composición es, en principio, aceptada aunque podrían hacerse matizaciones, sobre todo en lo referente a la operatividad ya que no se puede organizar un órgano de gestión si se pierde en gestionarse a sí mismo. Todavía hay que hacer algunas matizaciones», explicaron ayer fuentes socialistas.

Reunión Chaves-Arenas

Las reuniones y contactos telefónicos se produjeron en las últimas horas de la tarde de ayer y hasta el presidente del PP-A, Javier Arenas, se reunió con el secretario general de los socialistas andaluces y presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, para tratar este tema. Las mismas fuentes no descartaron próximos encuentros entre Chaves y Arenas para tratar el tema de Marbella. «Lo que sí estamos todos de acuerdo es que no estuviera representado en la gestora ni el GIL ni independientes», adelantaron los partidos implicados.

De este modo, la comisión gestora dirigirá el Ayuntamiento marbellí hasta las próximas elecciones municipales de mayo de 2007, después de que el Consejo de Ministros decidiera ayer la disolución de la corporación municipal. La decisión del Consejo de Ministros se tomó después de que la Comisión Permanente del Consejo de Estado elaborara un informe en el que señaló por unanimidad de sus miembros que no procedía la convocatoria de elecciones en Marbella.

Ante esta situación, las reuniones previstas para la jornada de hoy en la Diputación Provincial pueden servir para ratificar el acuerdo pactado ayer por las formaciones políticas. Así, el presidente del ente supramunicipal, Salvador Pendón, ha convocado para esta mañana a los cuatro partidos representados en esa institución para recabar impresiones.

En busca del consenso

No será una reunión de todos. Pendón irá recibiendo uno a uno, por separado y en encuentros programados de media hora a los responsables provinciales y portavoces del Partido Andalucista, Izquierda Unida, Partido Popular y PSOE, en ese orden. El presidente esperar alcanzar lo antes posible un pacto que permita constituir por consenso la comisión gestora.

El objetivo del acuerdo parece ser el común denominador de todos los actores. Tanto las fuerzas políticas como el propio Gobierno han manifestado la necesidad de que exista un entendimiento que permita pilotar sin tensiones la situación creada.

En este sentido, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó ayer tras la reunión del Consejo de Ministros que el ejecutivo espera que la comisión gestora adopte sus decisiones «con el mayor consenso posible y teniendo en cuenta siempre el interés general» y aclaró que el futuro órgano de gobierno municipal contará con la libertad y los límites que le confiere la ley «para tomar las decisiones que estime pertinentes».

Sin precedentes

El Consejo de Ministros fundamentó su decisión de disolver la corporación municipal de Marbella, una medida sin precedentes en la historia de la democracia española, en las «gravísimas imputaciones judiciales» que pesan sobre parte de sus miembros en relación con una trama de corrupción urbanística, según informó la vicepresidenta. El Gobierno adoptó esa decisión tras la propuesta de la Junta de Andalucía y una vez recibidos los informes preceptivos a favor de la disolución del Senado y la Comisión Nacional de Administración Local, así como el dictamen del Consejo de Estado que señala la imposibilidad de celebrar elecciones parciales en Marbella.

Fernández de la Vega explicó durante su comparecencia que el Gobierno justifica la adopción de la medida en tres argumentos. En primer lugar la «contravención sistemática de la legalidad por la actual corporación en el otorgamiento de licencias en materia de urbanismo», así como su «absoluta falta de colaboración con la Junta de Andalucía, al desatender sus numerosas solicitudes y requerimientos».

Paralización de obras

En segundo término, el Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero explica la decisión en la «inactividad del Ayuntamiento ante los distintos requerimientos judiciales para la paralización de obras», al igual que otras irregularidades, que incluyen permutas y enajenaciones de inmuebles contrarias a la legalidad.

En tercer lugar, en la «compleja y delicada situación» provocada por la salida del Consistorio de concejales y alcaldes inhabilitados penalmente, así como la situación procesal de diversos cargos municipales imputados como la alcaldesa, la primer y quinto tenientes de alcalde, varios concejales, el ex gerente de Urbanismo y el secretario del Ayuntamiento marbellí.

Tras la disolución, toca ahora la constitución de la comisión gestora. Pendón ha destacado que la gravedad de la situación requiere un acuerdo de todos los partidos y aunque confía en que la comisión se quede constituida en breve, advirtió que tan importante es la urgencia como el consenso. «No podemos ser presos de la urgencia ni de los plazos -explicó-, el objetivo es el consenso».

Sin candidatos

Pese al acuerdo inicial sobre la composición de la comisión, el presidente de la Diputación negó que tuviera algún candidato para presidir la entidad. «Yo no tengo una propuesta, lo que quiero es escuchar a las fuerzas políticas y fomentar un acuerdo a partir de lo que proponga cada una», dijo.

Por tanto, parece que el entendimiento se instala en las conversaciones entre las formaciones políticas sobre las medidas que se deben adoptar para devolver a Marbella a la normalidad institucional. El primer paso para el consenso pudo haberse dado ayer por la tarde en la reunión celebrada en Sevilla entre Manuel Chaves y Javier Arenas. Durante más de una hora y media, ambos dirigentes pudieron poner las bases del primer acuerdo sobre el futuro inmediato del municipio.

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