A George Floyd, contagiado del coronavirus y sin trabajo, parecía que nada malo le podía pasar más. Hasta que se topó con la rodilla del ... policía rubio que le asfixió sin piedad. Solo porque era negro. Hay situaciones que no tienen explicación ni se justifican, como esta de lo ocurrido en Minneapolis; y otras que se explican mal, o muy mal. En plena conmoción en buena parte del mundo occidental por la barbarie del policía norteamericano, que ha hecho salir a la calle a protestar contra el racismo a miles de personas saltándose el confinamiento y el miedo al contagio del coronavirus, en Andalucía el mismo miedo al Covid provoca lo contrario.
La responsabilidad de velar porque no haya rebrotes de la pandemia ha hecho que nuestros gobernantes autonómicos soliciten al Gobierno de España la suspensión este verano de la Operación Paso del Estrecho, el dispositivo de auxilio en los puertos andaluces a los miles de emigrantes norteafricanos en Europa de viaje de vacaciones a sus lugares de origen.
En política es importante saber medir el recorrido de las decisiones y esta va camino de estrellarse de forma estrepitosa. Hasta Vox, que no se prodiga en defender a los inmigrantes, se ha quedado a la izquierda del PP y el Cs andaluz. Antes de ser autoridad en la pandemia, estos dos partidos arrearon fuerte al Gobierno de Sánchez por la cuarentena a los viajeros extranjeros cuando ni siquiera se permitía el turismo de estos ni de nadie; También han dado caña para que se adelantara la entrada de turistas europeos. Hacemos campañas para que vengan millones de ellos a nuestras playas y hoteles. Vienen de los mismos países que los usuarios de la OPE, pero no se les da la misma consideración. Habrá que adoptar medidas de seguridad sanitaria con todos. Nadie quiere que haya rebrotes, pero la distinción de extranjeros ofende a ellos y a nosotros.
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