Lo que más duele
VOLTAJE ·
Lo importante no es la magnitud de la tragedia, sino lo mucho que se sufreEl reto no es pequeño. En poco tiempo, nos enfrentamos a una crisis financiera, una pandemia mundial, una constante tragedia migratoria, un volcán en erupción, ... ahora la sequía, el esplendor de los extremismos y de la violencia, el auge de los suicidios, las adicciones, el egoísmo y, en estos momentos, una guerra de consecuencias imprevisibles. Esto, que incluye a las peores cosas del mundo como la muerte y la enfermedad, se une a los acontecimientos de la vida diaria, que también duelen porque lo importante no es la magnitud de la tragedia, sino lo mucho que se sufre. La desgracia asoma en todos los estratos y en muchas personas, incluida gente que en teoría tiene éxito, pero que en la práctica está muerta de miedo, de dolor, de culpa, o de todo a la vez.
Hace unos días, escuché a la cantante Tulsa (que este jueves viene a Málaga invitada por el Aula de Cultura SUR) predecir que la siguiente epidemia será una crisis generalizada de salud mental; Miren Iza, que además ejerce como médico especialista en psiquiatría, recomendaba 'In treatment' ('En terapia'). La serie aborda la terapia psicológica desde diferentes pacientes y que, después de su estreno hace una década, ha vuelto en una nueva edición, con diferentes personajes, producida en pleno Covid y tratando los traumas de la pandemia, de la pérdida, el alcoholismo o la sexualidad. Si antes el terapeuta era Gabriel Byrne, ahora ejerce un portento de actriz, Uzo Aduba, que ganó un Emmy por este trabajo. Recuerdo todo lo que me enseñó 'In Treatment' hace diez años, cuando apenas se hablaba de salud mental. Ahora, todo lo que aprendo con la nueva versión de esta serie se me hace más necesario que nunca.
Quito HBO y, en ese lapso antes de apagar el televisor, sale Telecinco. Es 'Sálvame', y en la imagen aparece un extorero habitual en los asuntos del corazón y de otros órganos. Bajo su imagen, un rótulo anuncia lo siguiente: «Tenemos una información que va a acabar de hundir a José Antonio Canales. Vuelve lo que más le duele». Por más que sepa que es un programa 'de entretenimiento' y que casi todo es puro circo, me pregunto si esto hace algún bien, si no hemos aprendido nada sobre la condición humana, para mejorarla, cuando hay medios y redes especialistas en el ajusticiamiento y la doble moral ante la complicidad de una gente de la que me apena formar parte. Me han entrado ganas de terminar esta columna, por muy cursi que pueda resultar, diciendo que tenemos que cuidarnos mucho, que tenemos que querernos más y que, como dice un personaje en la serie, amar se basa en prestar atención al otro.
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