El desastroso caos de Cercanías
VOLTAJE ·
Cuesta creer que una de las líneas más rentables sufra una gestión tan nefasta
El servicio que ofrece Cercanías en Málaga y que he tenido la mala suerte de sufrir en mi propia experiencia es sencillamente clamoroso. Cuesta creer ... que una de las líneas ferroviarias más rentables de España sufra una gestión tan nefasta en una provincia que aspira a situarse como punto de encuentro mundial de tecnología. En lo que llevamos de año, se han cancelado más de 2.500 servicios. Solo ayer, lunes, se cancelaron 28 trenes de las líneas de Fuengirola y de Álora. En un acto de bondad, ahora Renfe sí va a informar de los trenes cancelados a los casi 12 millones de usuarios que utilizan esta red al año. Hasta hace poco, el usuario se encontraba con la cancelación de manera abrupta. Quién sabe cuántos planes buenos, cuántas mejoras de la vida de alguien habrá quedado disuelta por una de estas cancelaciones.
Los motivos de este ingente número de cancelaciones y de reducción de servicios son distintos, formando todos ellos un cúmulo de despropósitos que al final sufre el usuario. Cuando no es por huelgas, es por falta de maquinistas, o por intrigantes 'motivos técnicos'. En las estaciones, a menudo hay taquillas cerradas y máquinas expendedoras que no funcionan. La escasa presencia de interventores provoca que en los trenes no haya seguridad, la gente se cuela, hay veces en las que hay reyertas y las normas sanitarias se burlan con la alegría de la impunidad. El Gobierno central, que ya anunció ser consciente de que es más ecológico y rentable unir ciudades por tren que construir aeropuertos sin aviones, va a duplicar la inversión en Málaga en los próximos Presupuestos Generales. Ahí se contempla una mínima partida de 80 mil euros para el tren litoral o 'tren de lejanías' y otra inversión de 26 millones de euros para «Cercanías y Regionales» de Málaga, previsiblemente para mejorar las líneas y las estaciones de las líneas 1 y 2, es decir, para un lavado de cara.
Sin embargo, el desastre de gestión continuará sucediendo hasta su final indeterminado en una de las líneas ferroviarias más rentables del país y en un territorio, el de la Costa del Sol, ninguneado en una infraestructura que llevamos varias décadas esperando. Marbella es la mayor ciudad española sin tren, y en el top nacional de ciudades abandonadas están también Mijas o Estepona y, por el otro lado, Vélez o Rincón. Los partidos solo se acuerdan del tren litoral cuando están en la oposición o dando un mitin. Quizá con la culminación de la Senda Litoral sea más sencillo ir andando por la Costa que en tren. Menos mal que están los autobuses y el coche propio o, para los aventureros, el Bla Bla Car y la bicicleta.
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