EL MIRADOR

Il Padrino Della Torre

El alcalde ha incumplido el pacto a su antojo, a sabiendas de que C's apenas tiene margen de maniobra

Teodoro León Gross

Lunes, 19 de octubre 2015, 12:36

Raúl López es, in péctore, el nuevo gerente de la Sociedad Municipal de Aparcamientos. Ese podría parecer, sin más, uno de tantos titulares del día ... a día a beneficio de inventario. Sería un espejismo. Con un poco de perspectiva, se construye una secuencia ilustrativa, muy ilustrativa:

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I. El concejal Rául López es el presidente de la Sociedad de Aparcamientos en el mandato anterior. El clima en la empresa -una sociedad que lleva una década larga en beneficios- se deteriora.

II. Raúl López es excluido de las listas del PP.

III. De la Torre negocia con Ciudadanos un pacto ; y éste excluye a los políticos de los cargos ejecutivos, fomentando los concursos de méritos para cubrir esos puestos.

IV. De la Torre negocia con la parte privada colocar al político Raúl López como gerente de la Sociedad de Aparcamientos.

En esa secuencia, hay mucho mar de fondo. Si Raúl López no va en las listas es porque su partido no se fía de él. Se impuso la tesis de evitar el riesgo de tránsfugas ante la perspectiva de un resultado límite para el PP. Además de encabronar a la oposición a menudo herida por su tono faltón -el alcalde actúa con maneras exquisitas mientras usa a gente como Tere Porras o Raúl para el matonismo institucional- también crea muy mal rollo en el propio PP, sobre todo después de traicionar a Diego Maldonado, a quien llamaba 'tito', actuando como un jarrapellejos sin escrúpulos. Es verdad que la silla de ruedas de Raúl López a menudo es un parapeto emocional que impide afearle sus excesos, por temor a resultar políticamente incorrectos, pero su cartel se hunde. Y el pacto con Ciudadanos es la oportunidad perfecta de pasaportarlo a la actividad privada. Sin embargo, tres meses después, el alcalde va a premiarle con un cargo muy bien remunerado contra ese acuerdo. La pregunta interesante, claro, es por qué.

De la Torre se comporta a menudo como un 'capo di famiglia', esa clase de 'padrino' que se ocupa de proteger a los suyos. A Raúl le tenía reservado una componenda: si perdía el pulso para meterlo en la lista, le premiaría con una gerencia doblándole el sueldo. Después, sin embargo, el pacto con Ciudadanos se interpuso en esa carambola; pero De la Torre ha incumplido el pacto a su antojo, a sabiendas de que C's apenas tiene margen de maniobra antes del 20D. Así que previsiblemente habrá trágala de Cassá (a ver lo que tarda en otra bajada de pantalones asegurando «el pacto va viento en popa». «confiamos en su palabra».blablablá) y Raúl López va a ser gerente, sí o sí, con el voto de los socios privados. La clave ahora es ¿qué precio ha pagado el alcalde a los privados para colocar a su protegido? Naturalmente ellos no votan gratis a un gerente sin cualificación para el cargo, y además sin empatía. Sin duda el precio será alto, y por supuesto a cargo de los ciudadanos. Es la voluntad del Padrino.

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