El redentor del periodismo

1ª Lección (ya impartida). Hay que preguntar sin molestar.

2.-. Hay que titular con intensidad. Fíjense en él, en Juan Pablo Durán: «La derecha solamente sabe matar» o «Este estado de excepción que dirige Mariano Rajoy.». Contra el periodismo light, Durán demuestra el valor de un lenguaje potente. Eso sí, hay una regla: sólo contra la oposición.

3.- La hemeroteca es secundaria. Un periodista no debe caer en la tentación, por ejemplo, de referirse al sr. Durán y recordar que fue expedientado y multado por el Banco de España como consejero de CajaSur por la falta de control sobre riesgos crediticios. Hay que mirar al futuro brillante del susanismo.

4.- La perseverancia es clave. Hay que aprender a no rendirse. Durán sabe lo que es eso: en las elecciones de 2011 encabezó la lista en Córdoba y obtuvo el peor resultado de la historia del PSOE, pero ahí sigue, sin decaer. Toda una inspiración para periodistas blandos.

5.- Respetar los valores. Por ejemplo, Durán ha prosperado, saliendo de la nada, por su fidelidad a la presidenta. Es todo un modelo, con un mensaje claro: si los periodistas son sumisos a Susana, también a ellos les irá bien.

6.- No hay que hacer periodismo de especulaciones. Evítense las preguntas capciosas, tipo ¿el nombramiento de la hermana de Durán como directora general de Consumo de la Junta se debe a ser hermana de Durán?

7.- Jerarquizar lo importante, algo esencial en el buen periodismo. Durán, sin ir más lejos, entendió que él debía defender a Antonio Fernández, consejero encarcelado por los Eres; sin dudar entre la ley y el carnet. Esa es la idea.

8.-«Altura de miras, honradez». Sí, eso es clave, como recomienda Durán, autor de frases como ésta: «La derecha ni hace prisioneros ni deja heridos, solamente sabe matar, y si es posible en las cunetas, que es donde siempre nos han dejado a los socialistas».

9.- Meritocracia, por supuesto. Hay que saber valorar el conocimiento: «¡Qué vergüenza de estudios de Derecho!», dijo Durán en una ocasión del alcalde del PP. Él sabe bien de lo que habla, ya que no tiene estudios.

10.- Coherencia. Durán va a ser objeto de una querella de prevaricación al bloquear las primeras proposiciones no de ley de la oposición. He ahí su última lección: ser fiel al propio estilo hasta el final.

Sin duda el periodismo andaluz va a prosperar mucho desde ahora. Y arreglado el periodismo, tal vez incluso se propongan arreglar Andalucía.