La sequía rompe la paz entre los horticultores de Marbella

Esta situación ha desembocado en la salida de Arboretum de la gestión del recinto dejando la concesión que tenía por 30 años y pasando la misma de nuevo al Ayuntamiento de la ciudad que es el titular de los terrenos.

Recientemente, los horticultores que no estaban de acuerdo con la manera de dirigir el espacio natural, se han constituido en una nueva asociación denominada Marbella Verde y han presentado al Consistorio un proyecto para mantener los 87 huertos urbanos de la zona.

En el mismo plantean « la ampliación y mejora del uso social y medioambiental del parque» así como la administración del recinto por parte de los proponentes. En este sentido, los hortelanos temen que el Ayuntamiento les desaloje. «La parcela en la que ahora mismo están los huertos tiene 28.500 metros y la oferta que nos han hecho es trasladarlo a tres terrenos que en total dan una capacidad de unos 2.000 metros e independientes los unos de los otros por lo que se perderían en su gran mayoría», ha señalado el presidente de la entidad, Dionisio Carrillo.

Por su parte, la alcaldesa, Ángeles Muñoz, ha anunciado que «en los próximos días se va a reunir con ellos» así como que «antes de tomar ninguna decisión van a escuchar su propuesta».

Desde Arboretum, su presidente, Alejandro Orioli, ha calificado la situación de «insostenible». La Fundación terminaba el contrato con los hortelanos el pasado 1 de octubre, sin embargo, aún continúan en los huertos. «El parque está lleno de okupas porque están ahí sin ningún tipo de permiso», ha señalado.

El agua de la discordia

Ambas partes coinciden en un punto: la gestión del agua ha sido el detonante de este problema. Por un lado, Arboretum acusa a algunos hortelanos de «realizar un uso abusivo de agua» por lo que se retiraron algunos puntos de riego a mano para evitar esta situación. Por otro lado, desde Marbella Verde aseguran que «el consumo de agua era mucho mayor con el sistema de goteo nuevo al no calcular bien la duración del riego automático cada noche» a la vez que añaden que «los hortelanos mayores no podían ir a llenar las regaderas tan lejos» y que ese sistema es esencial en los primeros días de cultivo de una siembra.

El conflicto sigue creciendo en un cruce de acusaciones continuo. Arboretum ha denunciado ante la Justicia supuestas «agresiones a voluntarios» así como «robos». Marbella Verde, sin embargo, desmiente estos hechos y señala, por su parte, a la antigua concesionaria de presuntas «prácticas abusivas». La polémica está servida y será el Ayuntamiento quien tenga que decidir qué se hace en el terreno.