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Nadir en la puerta de su restaurante donde apila los alimentos que va a entregar SUR
Generosidad en forma de menú

Generosidad en forma de menú

Un restaurante argelino de Marbella ofrece a diario desayunos y cenas a personas sin hogar y a familias necesitadas

Charo Márquez

Marbella

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Viernes, 27 de marzo 2020, 15:59

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El restaurante 'Marhaba' está abierto durante la cuarentena pero no vende comida, la regala. Situado en la avenida Arias Maldonado de Marbella, tiene autorización para vender con servicio a domicilio, pero su propietario, el argelino Nadir Saidi, ha decidido poner su negocio al servicio de la comunidad durante la cuarentena. Desde las cinco de la tarde y hasta las dos de la madrugada, él y dos personas más, preparan menús y desayunos para todo el que lo necesite y, lo más importante, a cambio de nada.

'Marhaba' significa bienvenida. Cuando Nadir abrió este establecimiento en septiembre del pasado año, no imaginó que el nombre de su negocio iba a cobrar tanto sentido. Bienvenidos a este restaurante son todos aquellos que necesitan una cena o un tentempié durante la noche.

Lleva tres días preparando menús para familias con escasos recursos. El primer día atendió a 100 personas. Una voluntaria de la Asociación de Desempleados de San Pedro Alcántara recoge las bolsas y las distribuye a las familias que lo precisan. Otras personas se acercan directamente a recoger la comida.

«Ayer vino una mujer que se ha quedado sin trabajo y tiene tres hijos. Me dijo que no tenía dinero para comprar leche. Además del menú le di 10 euros para que comprara la leche, pero no quiso coger el dinero. Esto me mata», comenta afectado Nadir, que ahora ha decidido además de preparar los menús, comprar leche, galletas y bolsitas de chuches para las familias con niños pequeños como la de esta mujer.

Además prepara a diario menús para las personas sin hogar que están refugiadas en el pabellón Serrano Lima. El propio Nadir lleva la comida hasta el pabellón y, siempre manteniendo las distancias, las entrega al personal que los atiende.

Decidió hacer cenas porque cree que «todos deben irse a dormir con algo caliente en el estómago y así pueden descansar más tranquilos». Para el desayuno prepara bocadillos y los acompaña con zumos y refrescos.

El cocinero prepara unas lentejas
El cocinero prepara unas lentejas SUR

La generosidad de Nadir responde a la educación que le dieron sus padres. Recuerda que él empezó sin nada, recogiendo pimientos en Almería en 2004. Con esfuerzo fue convirtiéndose en un hombre de negocios. Ahora regenta la empresa 'Adams Car' de compra-venta y alquiler de coches de alta gama en Marbella, además de dos restaurantes. «No sabemos si mañana vamos a estar vivos y yo voy a compartir todo lo que tengo», explica al tiempo que indica que «no espero nada a cambio de esto. Soy un hombre de fe y sé que Dios sabrá lo que he hecho».

Mientras el restaurante está funcionando, pero a puerta cerrada, también ofrece bocadillos, café y te a los agentes de policía, taxistas y operarios municipales que tienen turno de noche. La mayoría de ellos agradece el detalle y deposita dinero en una hucha con la que al día siguiente Nadir vuelve a comprar reservas.

Desconoce cuánto tiempo podrá mantener esta situación. No teme a la ruina «porque la ruina es esto que estamos viviendo ahora«, alecciona. No muestra ningún tipo de preocupación por el futuro de su negocio, está agotando todos los recursos de su restaurante en esta misión que se ha autoimpuesto. La generosidad no entiende de presupuestos ni de rentabilidad.

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