We love roscón

Esperanza Peláez

Sábado, 4 de enero 2020 | Actualizado 22/01/2020 09:20h.

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Explicaba hace unos años Juan Mari Arzak que la dificultad de la cocina española para expandirse en el mundo radicaba en su vinculación a productos frescos a menudo caros o difíciles de encontrar fuera, mientras que los estándares italianos, basados en la trilogía harina-queso-tomate, viajaban muy bien. En realidad, el éxito de cualquier restaurante de cocina étnica en el extranjero radica en la habilidad de adaptar su carta a los gustos del país receptor. Un restaurante chino no ofrece las mismas especialidades en España y en Australia. Volviendo a lo patrio, las tapas, que aquí creemos imbatibles, gustan al turista de visita, pero no son una fórmula asegurada de éxito fuera. Depende de qué tapas y en qué contexto. El profundo conocimiento de los gustos estadounidenses, unido a la gran cultura gastronómica de la población mestiza de NY y a la expectación por la apertura en la ciudad del primer proyecto del chef José Andrés, ha hecho que su Mercado Little Spain, abierto junto a Ferran y Albert Adrià, haya sido un éxito, además del mejor y más completo espacio dedicado a la cocina española fuera de España. Tres restaurantes, dos bares y 15 puestos de venta temáticos con comida para llevar, permiten desde comerse un trozo de empanada gallega o unos churros, hasta comprar una cuña de queso payoyo y los accesorios para hacer paella. Sin perder la autenticidad, en el Mercado Little Spain se han hecho adaptaciones. En el puesto de bravas te puedes tomar las más genuinas, pero las papas fritas con salsa funcionan también con alioli o cabrales. En uno de los tres restaurantes puedes encontrar platos como los macarrones gratinados, la coliflor con bechamel o nuestro arroz a la cubana. No será cocina secular, pero sí es cocina española de las casas, y funciona para ese público. Little Spain se ha puesto de moda, y para la promoción de Navidad han elegido el imbatible roscón, la versión nacional del brioche, con la ventaja del gancho del haba y la sorpresa: el fundamental 'story telling'. Se venden desde 36 dólares y hay tortas por conseguirlos. Saber es ganar.