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NADA RELEVANTE

MARTÍN NAVARRETE

Sábado, 30 de noviembre 2019, 00:31

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El colegiado castellano-manchego Arcediano Monescillo no destaca por tener brillantez alguna en sus actuaciones y no se entiende que continúe en esta categoría después de 187 partidos arbitrados en su novena temporada en ella. Simplemente es un árbitro cumplidor en cuanto a que es del grupo de los indicadores de faltas. Por cierto, acumula muchos errores al no tener una interpretación fluida, lo que lleva a confundir el sentido de las mismas. Su capacidad para resolver partidos de distinta relevancia quizá sea lo que justifique su continuidad en Segunda.

La escasa calidad que tienen los partidos de Segunda dificulta en gran medida destacar aspectos positivos del trabajo del colegiado. A Arcediano le acompaña mucha serenidad en sus movimientos y también capacidad con el diálogo, y especialmente la atención que mantiene en las acciones de disputa de balón, que le ayuda a resolver el control disciplinario. Amonestó a Escassi por claro empujón sobre Luis; más tarde, a su compañero Gus Ledes por saltar con el brazo en el cuello de Dani Pacheco, y por último, a Gutiérrez, por clara falta a Sadiku.

Debió amonestar a Benkhemassa muy al final del encuentro al disputar el esférico con Marc Mateu. Y es que la fuerza desproporcionada que aplicó en la acción justifica suficientemente la tarjeta. En la decisión de anular el gol conseguido por Dani Pacheco no debió ser necesaria la intervención del VAR, ya que el malaguista Luis estaba en la jugada inicial en fuera de juego (muy al límite, pero fuera de juego en definitiva). Lo debió resolver el asistente Mateo Montañés porque la posición no admite duda. Jugadas como esta son las que hacen impopular el videoarbitraje.

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