Restaurantes y hoteles donan alimentos a entidades sociales de Málaga tras el cierre de los negocios

En el caso concreto de la hostelería han escogido dos vías: los alimentos que no eran de consumo inmediato se los han cedido al banco de alimentos Bancosol, mientras que la comida que ya estaba elaborada se la han llevado al Comedor de Santo Domingo de la capital. De hecho, como el inicio de la cuarentena pilló por sorpresa a muchos de ellos, gran parte de los productos entregados ya estaban listos para su consumo inmediato.

Desde la asociación de hosteleros de Málaga (Mahos) aseguran que esta es una forma de colaborar con quienes más lo necesitan y dicen tomar esta iniciativa en conciencia y teniendo en cuenta la responsabilidad social corporativa que tiene cualquier negocio. Del mismo modo, desde el Comedor de Santo Domingo se han propuesto que todos los alimentos excedentes durante estos días se destinen a personas a las que el coronavirus haya empeorado más su situación.

Iniciativa similar se ha puesto en marcha en diferentes grupos hoteleros de Málaga, que siguen dando muestras de su solidaridad y voluntad de contribuir a atender las necesidades que surjan ante la expansión del coronavirus. En concreto, la cadena pública Paradores –que tiene cinco establecimientos en la provincia–, tras cerrar su red nacional de hoteles, ha donado ocho toneladas de alimentos a entidades sociales de toda España que ayudan a los más vulnerables, evitando así el desperdicio alimentario.

También, han puesto a disposición del Ministerio de Sanidad aquellos materiales susceptibles de ser utilizados para atención médica, como 137.000 guantes de nitrilo. Entre los beneficiarios se encuentran organizaciones como Cáritas, Cruz Roja o bancos de alimentos, así como residencias de ancianos y comedores sociales. A ellos Paradores les ha repartido en diferentes localidades españolas, 1.550 docenas de huevos, más de 2,6 toneladas de naranjas de zumo, 2.000 kilos de otras frutas, 1.300 kilos de verduras o más de 800 kilos de patatas, además de casi 4.000 productos lácteos.

Asimismo, la cadena malagueña Fuerte Group está llevando a cabo un cierre escalonado y ordenado de sus establecimientos que ha dejado ya sin actividad a los dos negocios que tiene en Marbella, Fuerte Marbella y Amàre Beach Hotel Marbella. Este grupo ha decidido colaborar con las acciones solidarias que se están emprendiendo en estos días, cediendo todos los alimentos perecederos que ambos complejos tenían para su normal funcionamiento. Son más 1.500 kilos de alimentos como verduras, frutas, lácteos y embutidos, entre otros, que han sido entregados, a través de Fundación Fuerte, a la delegación que Cáritas tiene en la Parroquia del Calvario de Marbella, entidad que se ocupará de su distribución entre las familias y personas más necesitadas y, especialmente, entre las personas mayores que han sido identificadas como las más vulnerables en esta crisis. «La compañía andaluza, que en sus 63 años de historia jamás había tenido que afrontar un cierre como este, confía en que las medidas aprobadas por las autoridades y la responsabilidad de todos los ciudadanos, logre contener la pandemia lo antes posible, y salgamos de esta experiencia unidos y reforzados», asegura este grupo.

También la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos) ha hecho un llamamiento a sus asociados, que representa el 60% de la oferta de la provincia, para que quienes dispongan de mascarillas y guantes desechables y no vayan a utilizarlos los pongan a disposición de las Fuerzas de Seguridad del Estado de sus correspondientes municipios.