La Junta cifra en un 0,2% el seguimiento de la huelga educativa en Málaga

Desde Marea Verde se pide a la Consejería de Educación que el número máximo de alumnos por aula baje a 15, una ratio que entienden debe mantenerse tras la pandemia. Además, exigen la contratación de 20.000 profesores más, la habilitación de los espacios públicos necesarios para garantizar un entorno seguro; oposición a la política de privatizaciones (con la consiguiente eliminación de los conciertos educativos); ampliación de los contratos de refuerzos Covid para todo el curso 2020/21; oposición enérgica a la semipresencialidad a costa del tiempo lectivo y del currículum; un aumento significativo de la financiación y dotación de recursos de los centros educativos (con el objetivo de que la presencialidad se acompañe de seguridad); reducción de las tasas universitarias (no al tasazo) y derogación del Decreto de Escolarización.

Consideran que la situación de contagios y cierres de aulas y centros se va a recrudecer en las próximas semanas y que mantener los colegios abiertos va a suponer problemas de seguridad tanto para el alumnado como para sus familias y los propios docentes y trabajadores. Para Marea Verde, las soluciones pasan por la contratación de un número significativo de docentes que permita reducir la ratio, garantizar las sustituciones inmediatas del personal confinado, contratación pública de más personal no docente, aumento de los recursos en los centros educativos para atender al conjunto del alumnado y en especial al alumnado con necesidades educativas especiales, necesidad de adecuación y preparación de infraestructura existente para uso escolar seguro, presencia de enfermeros escolares o la dotación de recursos específicos para los protocolos Covid. Desde esta plataforma se critica el acuerdo alcanzado por los sindicatos mayoritarios y la Consejería de Educación para el incremento de plantillas, «un balón de oxígeno para el consejero Imbroda», aseguran, aunque reconocen que el acuerdo ha sido fruto de la presión ejercida. «Esto demuestra que la huelga es necesaria y que, organizándonos y movilizándonos, podemos presionar a la Consejería de Educación».