La Hiperronda de Málaga costaría 50 céntimos ida y vuelta si prospera el pago de las autovías
El Ministerio de Fomento prevé reclamar a los conductores una cuota que sería un 10% del coste por kilómetro de las autopistas
El Ministerio de Fomento, bajo gobierno socialista, viene amagando desde hace meses con la posibilidad de implantar un peaje a las autovías que ... actualmente son gratuitas. De momento es sólo una propuesta y hasta que no haya un Ejecutivo consolidado (ahora mismo está en funciones) no va a cuajar, aunque esta semana se ha conocido un dato clave. El ministro, José Luis Ávalos, siempre ha mantenido que sería un pago «simbólico», y desde su departamento han afinado ese simbolismo con la estimación de que el pago supondría en torno a una décima parte de lo que se abona ahora por una autopista de peaje.
En el caso de Málaga la carretera que tiene más papeletas para dejar de ser gratuita es la Hiperronda (que forma parte de la A-7), según confirmaron fuentes técnicas consultadas. De hecho, esta ya se barajó en los orígenes de la infraestructura como vía de pago. SUR ha extrapolado el coste por kilómetro de la cercana autopista de Las Pedrizas (AP-46) a la Segunda Ronda, para lo que se ha calculado el 10% del coste por kilómetro de esta y se ha multiplicado por los 21 que tiene la vía perimetral.
El resultado es que cada coche tendría que pagar 0,25 euros por trayecto, esto es, 0,50 euros la ida y la vuelta, siempre en una estimación propia no oficial. Por ejemplo, para un trabajador del PTA que la tenga que usar dos veces al día, de lunes a viernes (unos 20 días al mes), le supondría un desembolso de diez euros mensuales. El precio sería superior para los vehículos pesados, lo que ya ha generado el rechazo de los transportistas.
Además de los residentes en municipios del área metropolitana, como Rincón de la Victoria y Alhaurín de la Torre, esta circunvalación de gran capacidad tiene un uso eminentemente turístico, para desplazamientos de largo recorrido hacia los destinos de la Costa del Sol, por lo que la afección ciudadana a los malagueños sería menor y de ahí que sea más fácil justificar la transformación a peaje, según las mismas fuentes.
¿Pagar por las rondas?
Otro supuesto, menos probable, es que se determine el pago por las rondas Este y Oeste (MA-20), que suman unos 22 kilómetros de extensión. En este caso el precio sería prácticamente el mismo, apenas un céntimo más por trayecto (0,26 euros). Hay otras muchas carreteras estatales susceptibles de pasar a peaje, como la MA-21 (acceso a Torremolinos); MA-22 (acceso al Puerto de Málaga por la calle Pacífico); la A-45, hacia Córdoba y, sobre todo, la A-7, tanto en dirección a la Costa como hacia la Axarquía y el litoral de Granada. Fomento no ha concretado todavía qué reglas se aplicarán para determinar los nuevos itinerarios de pago. Por ahora todo lo que ha trascendido es que es una opción en estudio, que se está perfilando y que el pago será «simbólico», aunque lo cierto es que la idea cada vez cobra más fuerza, e incluso el Gobierno de la Junta, del PP y Cs, ya se ha manifestado en contra.
El Ejecutivo central defiende la propuesta en la necesidad de asegurar fondos para el mantenimiento de la red de autovías (que supone a nivel global un coste que ronda los 1.100 millones de euros al año); para compensar las emisiones contaminantes de esos vehículos y para reducir el desequilibrio con comunidades cuyos residentes soportan fuertes peajes. Fomento pretende que el cambio se lleve a cabo con un consenso con las comunidades autónomas, algo que, de entrada, parece difícil que vaya a ocurrir en el caso de Andalucía.
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