Guillermo Díaz: «No se deben imponer tesis económicas trasnochadas aprovechando la situación»

–¿Cómo lleva el confinamiento?

–Expectante porque es una situación nueva para todos. Por un lado, la llevo bien porque con mi hijo pequeño estoy pasando mucho tiempo, mucho más de las que suelo pasar, y luego me está permitiendo hacer recomendaciones de mis aficiones: la literatura, el cómic, el cine y la música. La parte mala es que me hago las mismas preguntas y preocupaciones que el resto de ciudadanos sobre el virus, el futuro de la economía,...

–¿Cómo valora la gestión que está haciendo el Gobierno de la crisis sanitaria?

–Bastante mejorable. Han pecado de improvisación, de cierta vanidad porque han tomado muchas decisiones sin contar con los demás y tampoco han generado seguridad en la gente.

–Y la oposición, ¿está a la altura de las circunstancias?

–No quiero de comentarista de la actualidad pero creo que se han notado dos formas de hacer oposición. La que va únicamente con la crítica, a veces un tanto disparatada y que ha hecho escuchar unas cosas un tanto excesivas. Y después está la oposición que hemos hecho nosotros con una crítica seria y contundente, pero, al mismo tiempo, con propuestas. No sirve de nada criticar permanentemente y no proponer nada.

–Cuando habla de ese tipo de crítica sin propuestas, ¿se refiere a Vox?

–También está ocurriendo con los gobiernos autonómicos. Es verdad que se han dicho cosas muy gruesas por parte de los representantes de Vox sobre eutanasias y tal. Son cosas muy excesivas, disparatadas y que no ayudan. Y también es cierto que el PSOE, allí donde no gobiernan, está siendo absolutamente desleal. Sus ayuntamientos están enviando cartas diciendo que la Junta de Andalucía requisa los epis a las empresas proveedoras y es falso. Ellos entran en ese juego de hacer partidismo político en la peor crisis que han vivido los españoles. Yo creo que Ciudadanos está dando un ejemplo de lo que es criticar y hacer oposición y eso no está reñido con ser leal no sólo al Gobierno de España sino a los españoles.

–¿Cuál es el principal reproche que le hace al Gobierno?

–La falta de previsión. Todo el mundo sabe que tenían que haberse tomado medidas antes. Luego ya ha habido otros errores sucesivos como el estar haciendo propaganda como han hecho con el último CIS... Todo esto descentra del objetivo principal que es salvar vidas y, una vez salvadas las vidas y salvaguardada la salud, salvar el empleo y la economía. Todo lo que sea despistarnos de esos dos objetivos, alguien no está haciendo bien su trabajo. Si el Gobierno no se centra únicamente en salvar vidas y salvar empleos y la economía se está equivocando. Si la oposición no está centrada en ayudar a salvar vidas y salvar economías también se está equivocando.

–Con un Gobierno de otro color político, ¿la situación hubiera sido diferente?

–No lo sé. Sí digo que en los gobiernos de las autonomías donde está Ciudadanos sí se ha visto una gestión seria y eficiente en las competencias que tenemos. El ejemplo es Andalucía, donde la consejera Rocío Blanco, al frente de Empleo, ya está adelantando la cuota a los autónomos que han tenido que pagarla porque el Gobierno se la cobró, eso es ser eficaz. Y al Gobierno de Sánchez se lo hemos puesto como condición para apoyarle algunos de los reales decretos. Eso es ser eficaz y hacer una oposición eficaz.

–Se sigue viendo una gran crispación política cuando hace falta unidad. ¿Falta altura política en estos momentos?

–Creo que sí falta altura política. Si no nos unimos ahora que estamos en la peor crisis que hemos conocido todos los políticos en activo, no sé qué tiene que pasar para que los partidos colaboren; es más, la historia no los demandará. En Ciudadanos estamos intentando tender puentes de manera permanente al Gobierno de España, con la mano tendida y propuestas. Quien esté pensando en votos con centenares de muertos todos los días, no sólo está muy equivocado sino que tiene una estructura moral que yo no puedo admitir.

–Sánchez ha abierto una ronda de contactos con los partidos para buscar unos nuevos Pactos de la Moncloa, ¿cuáles son las recetas que va a plantear Ciudadanos?

–Hemos planteado un Pacto de Reconstrucción Nacional con varios pilares fundamentales. Un plan urgente de contingencia sanitaria con medidas para asegurar el suministro de equipos de protección a los sanitarios, facilitar que haya tests masivos y consensuar cómo se lleva a cabo la desescalada. Para ello nos debe informar primero porque tenemos ideas que proponerle porque ningún partido tiene todas las soluciones, pero desde luego, las mejores soluciones saldrán entre todos los partidos. Junto a ello hay un plan de medidas económicas y de empleo, otro social para que nadie se quede atrás y establecer una posición común en Europa.

–¿Cuáles son las líneas rojas de Ciudadanos en materia económica y social?

–No se deben imponer ideologías y tesis económicas trasnochadas aprovechando esta situación. Tenemos que ser serios y la línea roja está en saber lo que se tiene entre manos y no intentar vendernos tesis económicas de principios del siglo XX que se han demostrado absolutamente ineficaces.

–¿Qué le parece que en el actual contexto, con más de 18.000 muertos, el vicepresidente Pablo Iglesias ataque a la Monarquía?

–Esto es hacer propaganda y no gobernar. Es colaborar a desunir. Es una gravísima irresponsabilidad. Los populismos cuando se ven desbordados por la realidad sólo saben hacer propaganda.

–Cuando ve que el CIS plantea una pregunta que pone en cuestión la libertad de información, ¿qué piensa?

–Primero, me preocupa. Y, en segundo lugar, el Gobierno nos va a tener enfrente absolutamente si pretende adoptar medidas de este tipo. Somos un partido liberal cuyo pivote es la libertad. Por otra parte, es utilizar una herramienta que pagan todos los españoles para intentar sostener las tesis de un Gobierno que pretende hacer propaganda en una situación como esta. Por favor, que se centren en salvar vidas y salvar empleos. Todo lo que sea utilizar mecanismos, estructuras, instituciones y dinero en algo distinto a esto es perder el tiempo y malgastar energías.

–Inés Arrimadas le nombró recientemente portavoz en la comisión de Sanidad. Es una muestra más de su ascenso político, ¿dónde está su techo?

–No veo techos o suelos en este aspecto. Me siento muy honrado y estoy contento de que Inés confíe en mí, pero también siento una grandísima responsabilidad. Estoy en la comisión de Sanidad en la mayor crisis sanitaria que ha conocido España, entonces no me ha dado tiempo a pensar en las cuestiones políticas personales que tiene estar ahí, sino que, automáticamente, me he puesto a estudiar desde qué es científicamente un coronavirus hasta los filtros de las mascarillas para aprender e intentar hacer este trabajo lo mejor posible.