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Concentración en Málaga contra Luis Rubiales, «la caverna machista» y «la cultura de la violación»
Un nutrido grupo convocado por la plataforma feminista del Sindicato de Estudiantes se manifiesta en solidaridad con Jenni Hermoso y las últimas víctimas de la violencia de género
«¡Fuera Rubiales y la caverna machista! ¡Basta de violencia contra las mujeres!» Con estas consignas que rezaban en la pancarta principal estaba llamada Málaga ... a concentrarse este viernes en la plaza de la Constitución «contra el machismo y la cultura de la violación, contra los abusos y las agresiones». Otra pancarta, que sostenía Toni Morillas, portavoz del grupo municipal Con Málaga, dejaba leer: «Se acabó. Sin consentimiento es agresión». Buscaban presionar para lograr la «destitución inmediata» de Luis Rubiales al frente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), después de su beso no consentido a la futbolista Jenni Hermoso y su discurso en que ven «la justificación de la violencia machista más despreciable». «Rubiales, si no dimites tú, te vamos a echar nosotras» era su declaración de intenciones.
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«No es un pico, es una agresión»; «Rubiales, baboso, tu beso es acoso»; «sólo sí es sí»; «machista el que besa, machista el que aplaude»; «no es no, lo demás es violación»; «tranquila, hermana, aquí está tu manada» eran algunas de las consignas que se coreaban en la concentración. También el clásico «estamos hasta el culo de tanto de machirulo». Además, hubo un recuerdo a las mujeres asesinadas en la última semana: «Nos están matando», se clamó.
Micaela Jiménez, responsable de feminismos de Podemos, leyó uno de los manifiestos, y en él destacó, además de la importancia de seguir respaldando a Jenni Hermoso para evitar el riesgo de que «Rubiales se vaya de rositas», también cómo el trabajo desarrollado por el movimiento por la igualdad y su debate sobre el consentimiento y el 'sólo sí es sí' ha dejado claro cuándo nos encontramos ante una agresión sexual. Y eso sobrevolaba: la labor de pedagogía ejercida por las mujeres. Algunos testimonios recogidos por este periódico mostraban el consenso social que se ha reunido alrededor de los últimos acontecimientos como una victoria para el feminismo en forma de una mayor conciencia igualitaria. Pero en todo tipo de encuentros de este signo siguen dejándose sentir las rencillas entre las diferentes orientaciones del movimiento. Porque, si Jiménez deslizó la reivindicación de la figura de Irene Montero, después Beatriz Pérez, de Libres y Combativas, la plataforma feminista del Sindicato de Estudiantes, la organización convocante, fue más beligerante con su memorial de agravios provocados por el machismo y los partidos conservadores, en primer lugar, pero también por el PSOE, al votar junto al PP la modificación de la ley del 'sólo es sí'. De hecho, si todo el feminismo estaba convocado a la concentración, sólo parecía presente el ligado a la ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero.
Pero los ciudadanos y las ciudadas que allí se congregaron parecían bastante al margen de estas diatribas a las que al final sólo prestan atención la prensa y los políticos. Por ejemplo, a Alicia Morales le llevó a acudir a la concentración la indignación que le ocasionó ese «abuso de poder retransmitido en directo por televisión», que no sólo ha sufrido Jenni Hermoso, sino que han padecido en algún momento todas las mujeres. Y un grupo de amigas, Ana Belén Espejo, Ana Abecia y Ana Fernández, mostraban también su enfado porque alguien pueda pensar que la agresión en que ha incurrido Rubiales «sea lo normal». Mientras tanto, había quien se felicitaba por que los hombres también se hayan unido al feminismo. Y, efectivamente, había muchos varones y de todas las edades: ahí estaban, por ejemplo, Juan Miguel López y Juan Alberto Jiménez, de 73 y 83 años, porque se declaran identificados con la lucha por la igualdad y también denunciaban la cultura patriarcal.
La convocatoria, al principio, no muy nutrida, se fue haciendo más numerosa conforme fueron pasando los minutos. Aunque los organizadores contaban con que las fechas no son buenas para que tuviera éxito. Eso decía Óscar Soria, portavoz del Sindicato de Estudiantes, minutos antes de las siete de la tarde: «La fecha es complicada, con gente de vacaciones, gente reincorporándose, pero no nos podíamos quedar sin hacer nada, porque ha sido un completo escándalo». Aunque también tildaba de victoria para el feminismo la unanimidad en el diagnóstico de los hechos: «Que se vea como agresión un beso sin consentimiento». También calificó de «asqueroso» el modo en que Rubiales se ha querido justificar.
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Durante la concentración se supo que el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) había dejado en falta «grave» la investigación a Rubiales, cuando el Gobierno, cuando presentó su denuncia, esperaba que la calificara de «muy grave». El tribunal, para tomar su decisión, se ampara en que considera que el beso de Rubiales a Hermoso no puede calificarse de abuso de poder. Eso significa que el Ejecutivo no podrá suspenderle y que el máximo periodo de inhabilitación será de dos años. El auditorio reunido en la plaza de la Constitución parecía ajeno a la decisión, pero su presencia y su clamor, que resonó durante alrededor de una hora en la plaza donde estaba congregado, daba muestras de que estaba preparado para un dictamen de ese cariz. Porque también en las conversaciones y en las proclamas se transmitía la necesidad de que «todos los rubiales» que se perciben presentes en todas las estructuras de poder salgan a la luz.
Tras la manifestación, Micaela Jiménez se pronunció en Twitter sobre la decisión del tribunal: «El TAD considera poco grave que un jefe bese sin consentimiento a su subordinada; la ley del 'sólo sí es sí': delito deagresión sexual con agravante de superioridad. A muchos 'rubiales con toga' no les gusta esa ley», escribió.
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Protestas en el resto de Andalucía
Cientos de personas, convocadas por diversos colectivos feministas, han protestado este viernes en diferentes puntos de Andalucía para mostrar su apoyo a las jugadoras de la Selección Femenina de Fútbol y su «repulsa» por los actos y declaraciones del presidente suspendido de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, tras el beso a Jenni Hermoso en la final del Mundial en Sidney (Australia). Así, unas 40 personas, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Granada, se han concentrado en la Plaza de la Aurora de Motril, localidad en la costa de Granada donde reside la familia de Rubiales, en la salida de la manifestación para apoyar a Jenni Hermoso, y mostrar su «repulsa» y «más profundo rechazo por los actos, declaraciones y actitud» del motrileño Luis Rubiales, «tanto en la final del mundial de fútbol femenino como en los días posteriores». Convocada por el colectivo Motril Feminista, la protesta ha tenido el apoyo de la plataforma Ocho de Marzo-25 de Noviembre contra la violencia de género de Granada, y ha salido, con algún espontáneo en defensa de Rubiales pero sin incidentes, en la misma semana en la que la madre del ejecutivo del fútbol, Ángeles Béjar, protagonizaba una huelga de hambre de dos días y medio en una parroquia del municipio para que la futbolista «diga la verdad» sobre el beso que le dio su hijo.La protesta llegaba al Cerro de la Virgen, con lemas como 'Jenni Hermoso, Motril sí te cree' y 'Se acabó'. «Lamentamos profundamente comprobar cómo sigue siendo absolutamente imprescindible el feminismo como movimiento social para reivindicar la defensa de los derechos que están en constante peligro de vulneración con las excusas y justificaciones más banales, y lo que es más grave en este caso, el intento de repartir culpas entre víctima y agresor», han indicado desde la organización convocante, donde, entre otras organizaciones, están PSOE, Podemos, IU, Verdes-Equo, UGT, CCOO o CGT. En Sevilla, donde ha convocado 'Libres y Combativas', la plataforma feminista impulsada por el Sindicato de Estudiantes e Izquierda Revolucionaria, también han participado cientos de personas, según las convocantes. Por su parte, en Cádiz, la protesta convocadapor la Asamblea de Estudiantes de Cádiz, con el apoyo de la Coordinadora de Colectivos Feministas de la Provincia, se ha celebrado en la Plaza de San Juan de Dios, mientras que en Jaén se han sumado a la concentración en la Subdelegación del Gobierno alrededor de 150 personas, según fuentes del colectivo Feministas 8M Jaén, que ha secundado la convocatoria de 'Libres y Combativas'. De otro lado, la Coordinadora de Colectivos Feministas de Almería se ha concentrado, a las 20,00 horas en la Puerta Purchena, para mostrar, entre otros asuntos de esta protesta, su apoyo a las jugadoras de la Selección.
Toni Morillas afirmó en declaraciones a SUR: «No sólo hay que lograr que Rubiales salga del ámbito deportivo de nuestro país, hay que conseguir que todos los Rubiales que existen en el ámbito deportivo, también en nuestra ciudad, y en nuestra provincia, y en el resto de ámbitos políticos y sociales, salgan de la esfera pública. Nos queda mucho trabajo por hacer y esta convocatoria contribuye a ello».
La convocatoria tenía extensión también a otras capitales andaluzas, como Cádiz o Sevilla, y por todo el país, después de que el pasado martes tuviera lugar una gran protesta en solidaridad con Jenni Hermoso en Madrid, con la participación de la ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, y la vicepresidenta segunda en funciones y dirigente de Sumar, Yolanda Díaz.
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