El primer autobús sin conductor de Málaga comienza las pruebas desde el Puerto al Centro

La presentación del vehículo, esta mañana, ha contado con la participación del alcalde, Francisco de la Torre; el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio; el director general del Grupo Avanza, Valentín Alonso; y el directivo de Irizar, Íñigo Azcona. Este proyecto acumula ya cuatro años, aunque los ensayos se iban a llevar a cabo a mediados del pasado, y se vieron interrumpidos por el Covid. El objetivo de la línea, compartida entre Avanza y la EMT, es dar servicio a los cruceristas que llegan a la terminal, para que puedan acceder al Casco Histórico, aunque en estos momentos no hay turistas ni tampoco previsión de vuelta.

«Málaga es la primera ciudad de Europa donde circula un autobús autónomo de doce metros, con ayuda de los semáforos inteligentes, con los que el Ayuntamiento ha colaborado», afirma De la Torre, quien se muestra orgulloso de que la ciudad fuera la elegida para poner en marcha este proyecto, «como un laboratorio urbano abierto a las tecnologías que pueden suponer ventajas para los ciudadanos». Para Rubio, es un proyecto ilusionante y que se verá acelerado por el cambio de tendencia propiciado por el Covid en cuanto a la sostenibilidad y la movilidad inteligente. «El espacio portuario es idóneo para este tipo de iniciativas».

Valentín Alonso pone de relieve que el proyecto de I+D Automost, que así se llama, está financiado por el CDTI y tiene como objetivo avanzar sobre la automatización del transporte colectivo, con un presupuesto de nueve millones en un consorcio de siete socios, además de varias universidades. «El proyecto entra en su fase final con esta prueba en vivo en las calles de Málaga», comentó, y destacó que por primera vez se aplica la automatización a un autobús de viajeros de tamaño estándar, de doce metros, con capacidad para 70 viajeros, que va a replicar el trayecto que ya realizaba la línea 90 de la EMT. «Estamos hablando de transporte colectivo real, hasta ahora se había hecho sólo con pequeños vehículos para 12 personas, e interacciona en un escenario real con otros vehículos, peatones y ciclistas». «Nadie discute ya que en el futuro va a haber vehículos autónomos, la pregunta es cuándo y cómo afectará a nuestra movilidad».

Para Íñigo Azcona, la conducción autónoma será el futuro en las ciudades, y ayudará a mejorar la movilidad. «Queremos hacer un llamamiento a todos los malagueños para que vengan a probarlo y comprueben que es seguro y que ya es una realidad».