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La sospechosa, captada por una cámara de seguridad SUR

La mujer de 76 años detenida por robos en pisos turísticos tiene 40 antecedentes con ocho identidades

La arrestada en la 'operación Visillo' trató de engañar a los agentes simulando estar desorientada después de que unos moradores la sorprendieran en un piso

Viernes, 18 de octubre 2019, 02:05

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Se presentó como una anciana desvalida, desorientada, que se movía con dificultad. Tan bien disimulaba que hasta hizo dudar a los investigadores. Pero el relato de la intervención policial que la había llevado al calabozo distaba, y mucho, de la imagen que pretendía dar. Cuando los moradores del piso en el que intentaba robar la sorprendieron dentro del inmueble, no dudó en darse a la fuga a la carrera y acabó siendo interceptada por una patrulla. Aquella mujer, que en realidad tenía 76 años, aunque aparentara más, era una vieja conocida de la Policía Nacional, capaz de manejar hasta ocho identidades diferentes entre las que acumula más de 40 antecedentes.

La 'operación Visillo', como se ha denominado a la investigación originada tras su último arresto en honor al célebre personaje del humorista José Mota, 'la vieja'l visillo', arranca el 19 de septiembre, cuando una unidad de la Policía Local acude al aviso de unos vecinos que aseguraban haber sorprendido a una señora mayor dentro de su casa. Los agentes la interceptaron cuando trataba de escapar -siempre según fuentes próximas a la investigación- y la trasladaron a la Comisaría Provincial. Una vez allí, ingresó en los calabozos.

Al reseñarla, la detenida dio unos datos personales sin mácula en la base de datos policiales. Aparentemente, no tenía antecedentes. ¿Y si se metió en aquella casa por error, desorientada? Pero las dudas iniciales de los investigadores del Grupo de Robos, que llegaron a empatizar con la mujer por esa apariencia que intentaba dar, se disiparon muy pronto. Concretamente, al tomarle las huellas. Fue así como descubrieron que manejaba hasta siete identidades. La octava era la que acababa de proporcionarles.

Lo primero que sorprendió a los policías fue que hubiese sido capaz de memorizar todos los datos personales de esas ocho identidades [no utilizaba documentación falsa, pero sí que era capaz de relacionar todos los datos aparejados a ellas, como la fecha de nacimiento, dirección, padres, etc]. Lo segundo, la larga ristra de antecedentes policiales vinculados a esos siete nombres con los que, en algún momento de su vida, había sido identificada: tenía más de 40 reseñas, según las mismas fuentes.

Ahí comenzó para los agentes del Grupo de Robos la llamada 'operación Visillo'. Los investigadores llegaron a la conclusión de que la sospechosa manejaba llaves falsas, esto es, disponía de un juego completo de las llaves que abrían un conjunto de apartamentos turísticos gestionados por una empresa en el Centro de la capital. La tesis policial es que, con ellas, conseguía colarse en las viviendas para sustraer efectos de valor -dinero, joyas o bolsos- de los turistas que allí se alojaban.

La otra prueba clave la encontraron en los policías en una cámara de seguridad instalada en el edificio, unas imágenes a las que ha tenido acceso SUR. La videovigilancia captó a la sospechosa en actitud vigilante en el rellano, cuando supuestamente se disponía a robar en uno de los pisos. En el vídeo se aprecia cómo echa un vistazo a las escaleras y se asegura de que el ascensor está en su planta para evitar que un vecino pueda llamarlo y recibir una visita inoportuna.

Tras amasar la investigación, los agentes procedieron, por segunda vez en un mes, a la detención de la sospechosa. La arrestaron el pasado día 11, esta vez, acusada de otros tres robos en el interior de viviendas vacacionales. Ya ha pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 6 de Málaga junto al atestado policial.

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