Borrar
Losetas hundidas en mitad de la acera en la calle Alonso Cano.
La guarida de 'dientecitos'

La guarida de 'dientecitos'

COSAS DE LA CIUDAD ·

CLAUDIA SAN MARTÍN

Domingo, 4 de noviembre 2018, 11:17

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La cavidad que hay entre las mesas de un restaurante abierto recientemente se ha convertido en la nueva guarida de uno de los nuevos vecinos del barrio que no es bien aceptado por los viandantes. 'Dientecitos' es el nombre del ratón que entra y sale de su guarida en plena calle Alonso Cano, en el entorno de la avenida Arroyo de los Ángeles y Doctor Gálvez Ginachero sobre todo, como aseguran los dueños del restaurante y quienes le pusieron el apodo jocosamente, cuando cae la noche. El pequeño socavón se originó el pasado abril a causa de las fuertes lluvias, y aunque desde el establecimiento dispusieron una tabla de madera sobre estas balsosas rotas con el fin de tapar la rotura y evitar de esa manera que pudiera ocasionar algún problema a los clientes o a los viandantes, fue una solución que no duró mucho. Tiempo después, los propietarios del restaurante pusieron otra tabla más gruesa que la anterior, con idea de que al tener más peso, el roedor no pudiera empujarla para salir de su escondrijo.

«Se ha llamado al 010 para que lo arreglen, pero nada. Puede meter el pie una persona mayor», comenta Cristina García, del resturante, visiblemente indignada desde que se originó meses atrás por el peligro que supone un mal tropiezo en su día a día. Aparte de los riesgos, para los propietarios supone una pérdida al no poder disponer más mesas en la terraza.

Suciedad entre la maleza.
Suciedad entre la maleza.

Campanillas: Basura cerca de un supermercado

En la calle Sarajevo, en el municipio de Campanillas, abundan los hierbajos entre las vallas que delimitan un descampado y un largo camino de despercidios que deja una estampa de abandono absoluto. Ambas imágenes son del entorno de un supermercado, sobre el que Rocío Sánchez, vecina de la zona, opina que «es un gran contraste entre las zonas porque un supermercado debe ser algo higiénico, y salir y encontrarte la calle así es una pena». La basura se extiende por toda la vía, entre los matojos secos y alrededor de la valla, que no parece haberse acumulado recientemente.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios