El Clínico mejora la seguridad de los pacientes que son intervenidos quirúrgicamente

El Manual de Crisis en Anestesia y Pacientes Críticos ha sido publicado por el Sistema de Comunicación de Incidentes de Seguridad de Anestesia a nivel nacional (SENSAR) y es una herramienta útil y práctica, a través de la que se describe de forma concisa, clara y detallada qué hacer ante las situaciones urgentes más frecuentes en el área quirúrgica y postquirúrgica, lo que facilita prevenir eventos adversos a los enfermos.

El nuevo protocolo incluye las directrices para mejorar la seguridad del paciente en situaciones tan diversas como reanimación en embarazadas, taquicardia, asistolia, aspiración pulmonar, neumotórax, anafilaxia, edema pulmonar, hemorragia masiva, hipertensión e hipotensión arterial, broncoespasmo e isquemia miocárdica, entre otras circunstancias que pueden comprometer la vida del enfermo en el área quirúrgica.

La especialista en anestesia y coordinadora de esta nueva estrategia de seguridad para el área quirúrgica del Clínico, María del Carmen Avellaneda, explicó: «Estos manuales describen paso a paso qué hacer ante situaciones de asistencia urgente con el fin de evitar eventos adversos que se puedan producir por estrés, cansancio, complejidad e intervención de múltiples participantes». La doctora Avellaneda añadió que la seguridad del paciente quirúrgico es una prioridad de salud pública tal y como especificó la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2008, a través de su segundo Reto Mundial por la Seguridad del Paciente. «La cirugía segura salva vidas».

Por su parte, la coordinadora de cuidados de enfermería de la unidad de anestesia y reanimación del Clínico, Cristina Narbona, señaló que desde hace ya varios años se trabaja en la mejora continua de la seguridad del paciente mediante estrategias implantadas en esta área especializada para solucionar cualquiera de las situaciones de urgencia vital que pueden presentarse a diario de la forma más eficaz y eficiente posible.

La puesta en marcha de esas directrices -avaladas y coordinadas por el área de seguridad del Paciente del Clínico- fue aprobada por la dirección del hospital y se aplica desde ayer tanto en los quirófano del Clínico Universitario como del Marítimo de Torremolinos.