El Ayuntamiento de Málaga echa un pulso a la Junta para convertir en hotel el edificio de Correos

En concreto, la Junta solicitó la tramitación de una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbanística de Málaga (PGOU) para que la finca deje de tener una calificación como equipamiento público de carácter local y un uso de servicio de interés público y social, y pase a ser para el servicio terciario hotelero. Este cambio de uso requiere, entre otros trámites, de una compensación obligatoria a la ciudad por la pérdida de un espacio dedicado a un fin público o de interés general. La legislación urbanística contempla que esa compensación se haga mediante la cesión de suelo para equipamiento en un ámbito próximo a la parcela que pierde esa condición.

En este caso, como ya informó este periódico (ver SUR21/2/2018), la Junta ha propuesto al Ayuntamiento la entrega de los locales de la calle Palestina que años atrás albergaron la sede de la Gerencia Municipal de Urbanismo y que suman una superficie de 4.097 metros cuadrados. Para el Gobierno andaluz, esta es la mejor de las opciones para poder encajar el nuevo uso hotelero del edificio y compensar por ello al Ayuntamiento.

Sin embargo, para los responsables de Urbanismo, este ofrecimiento resulta «insuficiente». Así lo señaló el concejal de Ordenación delTerritorio, Francisco Pomares, quien apuntó que ha solicitado una reunión con la Dirección General de Patrimonio de la Junta para abordar este asunto. «Queremos ver todas las cartas sobre la mesa, ver todo lo que pueden ofrecer a cambio de esta modificación del PGOU que solicitan», apuntó Pomares, quien reconoció que, hasta que no se llegue a un acuerdo respecto a esa obligatoria compensación a la ciudad, el trámite «está parado».

Además de esa contrapartida, el cambio de uso del edificio de Correos requiere pasar por otros trámites establecidos por la legislación andaluza, entre ellos una evaluación ambiental que la Junta considera que debe ser simplificada –más corta en cuanto a plazos que la ordinaria– al tratarse de una variación puntual y no estructural del planeamiento urbanístico. Asimismo, será clave el informe que deberá emitir al respecto el Consejo Consultivo de Andalucía, por tratarse de un suelo que perderá la condición de equipamiento público para albergar un uso lucrativo.

En la documentación que presentó para pedir la modificación del uso de la parcela de Correos, la Junta recordó al Consistorio que el edificio, concluido en 1990, se encuentra en una situación urbanística de «fuera de ordenación» por superar la altura y la edificabilidad permitida en este ámbito del Centro. Por ello, dejarlo tal y como está actualmente, clausurado desde 2009, podría implicar para el Ayuntamiento la obligación de expropiarlo.

Por otro lado, cabe recordar que, para poder subastar el edificio de Correos, la Administración regional deberá salvar el embargo que aún pesa sobre el mismo por parte de la Diputación Provincial a cuenta de las cantidades que el Gobierno andaluz adeuda a los ayuntamientos de la provincia en materia tributaria.