El Astoria sigue teniendo su público

La medida adoptada por el Ayuntamiento esta semana al tapiar la entrada del abandonado cine Astoria en un intento por hacer desistir a los indigentes ... de que se situaran allí, tras las protestas vecinales por la imagen ofrecida y el mal olor de la zona, no ha resultado efectiva. Apenas horas después de que los operarios terminaran de tapiar con bloques de hormigón la entrada, y con el enfoscado aún húmedo, los indigentes han vuelto al lugar con sus mantas, cartones y con sus perros, aunque ahora no disponen del hueco que tenían antes justo a la entrada del antiguo cine. Un espacio que les servía de refugio, y también de aseo, a juzgar por el nauseabundo olor que al pasar por allí desprendía la zona, algo que había generado protestas y dio pie para que la Gerencia de Urbanismo decidiera finalmente tapiar la entrada del cine en un intento por disuadir a los indigentes de que acamparan en aquel lugar. De poco ha servido la actuación municipal, que para muchos ha llegado tarde y en el peor momento debido al intenso frío de estos últimos días. El jueves ya se podía observar cómo los indigentes regresaban a ocupar el lugar, algo de lo que han sido testigos muchos ciudadanos que ven con incredulidad como todo sigue igual y piensan que más vale que el concurso para dotar de un uso a ese lugar se resuelva cuanto antes, dado el lamentable espectáculo que ofrece este céntrico enclave. Una penosa imagen para los numerosos visitantes que recibe la ciudad y que pasan por ese lugar camino de la Fundación y de la casa natal Picasso, y para los ciudadanos que a diario pasan por allí y que tienen que soportar el olor insoportable que desprende la zona.