La vía verde para el Guadalmedina, pendiente del permiso de la Junta
El Ayuntamiento ultima el proyecto para este sendero ciclista y senderista, que podría contar con fondos en su presupuesto para 2016
Jesús Hinojosa
Lunes, 16 de noviembre 2015, 00:39
¿Será una realidad el recorrido para peatones y bicicletas diseñado por la Fundación Ciedes para el cauce del Guadalmedina? La respuesta a esta pregunta ... la tiene la Junta de Andalucía, cuyo pronunciamiento sobre este proyecto, denominado como vía verde, resulta clave para que pueda materializarse. El alcalde, Francisco de la Torre, ya anunció su intención de incluir en los presupuestos municipales del año que viene una partida para poder acometer una actuación que, en principio, cuenta con el respaldo unánime de los grupos políticos, arquitectos y vecinos. Sin embargo, todo dependerá de lo que diga la Administración regional.
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Una de las cuestiones que podrían obstaculizar la realización de la vía verde para el Guadalmedina es que todavía no se ha aprobado el plan especial para el río contemplado en el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU). No obstante, el concejal de Ordenación delTerritorio, Francisco Pomares, explicó que, una vez analizada esta cuestión, se ha determinado que la ausencia de plan especial no impide que pueda realizarse la vía verde. Eso sí, se marcó como objetivo que el plan pueda estar aprobado en 2017.
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«Ya estamos trabajando para que en los próximos dos años se pueda concretar y aprobar la solución definitiva para el río», dijo. Para ello, la Fundación Ciedes está realizando varios estudios técnicos previos, pero resulta clave la participación en el proceso de la Junta de Andalucía, que tiene las competencias sobre el río y que por el momento no ha respondido sobre la firma de un protocolo de intenciones que también rubricarían Ayuntamiento, Gobierno central, Diputación Provincial y Autoridad Portuaria.
Según fuentes del Gobierno andaluz consultadas por este periódico, el expediente de la vía verde para elGuadalmedina llegó el pasado 20 de septiembre al Servicio de Dominio Público Hidráulico y Calidad de Aguas de la Consejería de Medio Ambiente, con sede en Málaga, en el palacio de la Tinta que albergó la desaparecida Confederación Hidrográfica del Sur. A partir de esa fecha, los técnicos de la Junta tienen de plazo un año para informar sobre el proyecto y, en el caso de que no contestaran pasado ese periodo, se entendería que rechazan el diseño presentado. No obstante, las fuentes confiaron en que no se llegue a agotar el plazo de un año sin contestar en un sentido o en otro.
Así, aunque el equipo de gobierno municipal reserve alguna partida para acometer total o parcialmente la vía verde en sus presupuestos para 2016, todo dependerá del dictamen de la Consejería de Medio Ambiente.
Según ha podido conocer este periódico, los reparos de la Junta a esta iniciativa podrían producirse sobre el tramo de la vía verde que discurre entre el puente de Tetuán y el de Armiñán. Y es que en este espacio discurriría por el lecho del río, aprovechando el camino ya trazado para el paso de camiones de la obra que se realizó el año pasado para reducir el hedor de la desembocadura. Medio Ambiente tendría que dar el permiso para que los malagueños pudieran bajar al cauce, algo que de hecho ya sucede y para lo que se piden autorizaciones puntuales, pero que implica para la administración regional asumir una responsabilidad permanente al ponerlo en negro sobre blanco. En cambio, parece que la luz verde está garantizada para el tramo de vía verde aguas arriba del puente de Armiñán. En este caso, tras subir por la rampa situada junto al conocido como colegio del mapa, el sendero llegaría hasta las inmediaciones del colegio de La Goleta y, a partir de ahí, tomaría la berma o pasillo de tierra elevado que ya existe, entre el puente de Armiñán y la presa, y que enmarca el lecho del río.
Casi un millón de euros
Ciedes y los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo ya han ultimado la redacción del proyecto, cuyo coste ascendería en total a 930.000 euros. La actuación supondría establecer un sendero o recorrido para peatones y bicicletas con una longitud de 5,17 kilómetros entre el puente de Tetuán y la presa del Limonero. Tendría una anchura variable, de entre tres y cinco metros, según los tramos. Para el tramo entre los puentes de Armiñán y la Rosaleda, el Ayuntamiento ha diseñado un plan de embellecimiento de forma que se convierta en una zona de esparcimiento para los vecinos de la zona. Así, junto a la vía verde, se plantean cuatro áreas de descanso equidistantes, iluminadas con farolas, y dotadas con bancos y papeleras.
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