La exjefa de Urbanismo dice ahora que no ha sido presionada por sus jefes directos

No se retracta, pero sí que da un paso atrás para intentar despejar las dudas de corrupción que 24 horas antes había dejado caer sobre la cúpula de la Gerencia Municipal de Urbanismo. Después de asegurar que su destitución como número 3 del organismo público respondía a su negativa «a hacer cosas que eran ilegales y hacer la vista gorda» respecto a los 130 expedientes abiertos por infracciones urbanísticas denunciadas en el conjunto residencial Villas del Arenal (Intelhorce), Teresa Domingo procuró ayer alejar de toda sospecha a sus jefes directos. «Solo quería aclarar que ni el concejal Francisco Pomares ni el gerente José Cardador me han incitado a prevaricar», afirmaba a este periódico.

Lo que sí que mantiene es que ha recibido «muchas presiones», aunque sin decir de quién ni de dónde más allá de desviar la cuestión apuntando que «está todo en las redes sociales». Reproduciendo textualmente las palabras de Domingo que ayer recogía este periódico «Mi honor y mi prestigio profesional no se lo cargan ni Pomares, ni Porras ni Cardador», la pregunta era obligada. ¿Se refiere entonces a Teresa Porras, la concejala del distrito Cruz del Humilladero que ha mediado con los vecinos en este asunto? La respuesta no aporta nada: «Quien o quienes hayan sido me lo voy a guardar para mi defensa».

Mientras la que hasta el pasado miércoles estaba al frente del departamento de Licencias y Planificación Urbanística precisaba sus declaraciones, en el equipo de gobierno del PP guardaban silencio después de advertir el jueves de que, si no se retractaba en sus denuncias de supuestas presiones se le abriría un expediente disciplinario. «A ver qué ocurre», se limitaba a expresar ayer el portavoz del gobierno municipal, Mario Cortés. Este periódico también intentó durante toda la jornada de ayer hablar con Pomares, aunque sin éxito.

Consejo extraordinario

Para intentar arrojar algo de luz, IU anunció ayer que solicitará por escrito la convocatoria de un consejo extraordinario y urgente de Urbanismo en el que comparezcan tanto el concejal como el alcalde y presidente de la GMU, Francisco de la Torre, para dar explicaciones. «Se trata de unas acusaciones sobre delitos gravísimos ante los cuales el equipo de gobierno tiene que responder y no ponerse de lado restándoles importancia», afirmó el portavoz del grupo, Eduardo Zorrilla, quien también pidió la apertura de una investigación interna y de un expediente informativo sobre los hechos. «Es absurdo seguir diciendo que es un malentendido cuando la exjefa se ha reafirmado en sus declaraciones, por lo tanto sólo cabe que el equipo de gobierno tome acciones legales contra esta exdirectiva si las acusaciones son falsas, o si no lo son que dimitan los responsables de estas ilegalidades», remarcó.