Macron y Merkel defienden la estrategia europea de vacunas frente a las críticas

«Estamos en mitad de la batalla. Y en medio de la batalla, debemos combatir», sostuvo Macron en una rueda de prensa conjunta por videoconferencia con Merkel al finalizar el Consejo franco-alemán de Defensa y de Seguridad, que se celebró a distancia por la pandemia de coronavirus.

«Apoyo totalmente el enfoque europeo porque no debemos vacunar un país en vez de otro. ¿Qué diríamos hoy si Francia y Alemania estuvieran compitiendo entre sí por las vacunas para comprar o producir?», se preguntó el presidente francés. «Sería una escena de desorden, contraproducente desde el punto de vista económico y sobre todo desde el punto de vista sanitario», opinó desde el Palacio del Elíseo.

En vez de ir cada uno por su lado y competir entre ellos en el mercado internacional de vacunas, los países de la UE han desarrollado una estrategia común. La Comisión Europea ha llegado a acuerdos con los laboratorios en nombre de los Veintisiete. Una vez que los antivirales son autorizados en suelo comunitario, todos los Estados miembros pueden tener acceso a ellos al mismo tiempo. De igual modo, la distribución se realiza per cápita para garantizar que todos cuentan con un reparto equitativo.

«Europa es el lugar donde hemos comprado más vacunas, garantizado más dosis y producido en un mismo espacio más vacunas juntos», explicó Macron, que recordó que la UE ha firmado contratos con los principales laboratorios que le garantizan un total de 2.300 millones de unidades. Al igual que él, la canciller alemana consideró que la decisión de coordinar a nivel europeo la compra de antivirales fue la decisión correcta. Merkel apoyó el trabajo realizado en la materia por la Comisión y su presidenta, Ursula von der Leyen.

La jefa del Gobierno alemán recordó que no se puede decidir «de la noche a la mañana» ampliar la producción de vacunas porque es un proceso técnicamente muy complejo. «A muchos de nuestros ciudadanos les gustaría tener más vacunas y eso es lo que vamos a hacer», prometió Merkel en videoconferencia desde Berlín. A su vez, Macron reconoció que Europa está teniendo problemas de producción de antivirales porque «no habíamos previsto que habría un éxito tan rápido y tan seguro sobre las vacunas de ARN mensajero, que una buena parte de la producción se hace en EE UU, aunque también hay mucha fabricación en Europa».

«Marzo será mejor que febrero, y, a partir de abril, las cosas irán mucho mejor. Y de abril a junio, estaremos en la organización de una campaña de vacunación que tomará buen ritmo», se mostró confiado el jefe del Elíseo, quien prometió que harán «todo lo posible para que las cosas vayan más rápido» a partir de ahora y poder «preparar la producción de vacunas de otoño-invierno».

La estrategia de la Comisión ha sido objeto de críticas dada la lentitud de la campaña de vacunación en la UE, si se compara con la de otros países no pertenecientes al club. El Estado que presenta una mejor proporción de inmunizados es Israel, que ya ha suministrado el antiviral a 55,1 personas por cada 100 habitantes, seguido de Reino Unido (14,7) y EE UU (10 dosis), según datos de la agencia de noticias Bloomberg. En Alemania la proporción de vacunados es de 3 y en Francia, de 2,4, siendo la media europea de 2,9 por cada 100 habitantes.