Borrar

Hezbolá ve «el inicio del fin de Israel»

MIKEL AYESTARAN CORRESPONSAL

Martes, 12 de diciembre 2017, 00:29

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

jerusalén. La decisión de Donald Trump de reconocer Jerusalén como capital de Israel provocó una nueva jornada de protestas y decenas de miles de personas respondieron a la llamada de Hezbolá en las calles de Beirut. El secretario general del Partido de Dios, Hasán Nasralá, dirigió a sus seguidores un mensaje en el que aseguró que «nunca abandonaremos Jerusalén» y que «el anuncio de Trump es el inicio del final de Israel». El líder del partido y milicia chií libanesa, que en 2006 libró una guerra de 33 días contra Israel, llamó a una nueva intifada y dijo que, una vez que ya está casi terminada la lucha contra grupos extremistas en la región, en referencia a la derrota del Estado Islámico en Siria, «dedicaremos todo nuestro tiempo» a Jerusalén y los palestinos.

La multitudinaria marcha en Beirut, en la que se podían leer eslóganes como «Jerusalén es nuestra», fue la mayor movilización en una jornada en la que en Tierra Santa se volvieron a registrar choques entre manifestantes palestinos y fuerzas israelíes, aunque de menor intensidad que en días anteriores. Al menos 29 personas resultaron heridas, según la Media Luna Roja, en los enfrentamientos que tuvieron lugar en Gaza, Ramala, Hebrón y Tulkarem. Pese a los llamamientos a la protesta por parte de Fatah y Hamás, principales facciones palestinas, hasta el momento no se ha producido una respuesta masiva a la decisión de Trump.

El apoyo de Hezbolá coincidió con la llamada del general de la Guardia Revolucionaria de Irán, Qassem Suleimani, a los comandantes de las Brigadas Al Qassam, brazo armado de Hamás, para mostrarles su apoyo y asegurar que «todas las fuerzas de la resistencia en la región estamos listas para defender Al Aqsa», según medios iraníes.

Aunque la Liga Árabe condenó la medida adoptada por Estados Unidos, de momento solo hay palabras de rechazo y ningún país ha aprobado medidas concretas. La voz más crítica fue un día más la del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. Para el líder turco, reconocer a la Ciudad Santa como la capital de Israel convierte a Estados Unidos en un «socio» en el «derramamiento de sangre» provocado por esa declaración en la región. «Los que han hecho de Jerusalén un calabozo para los musulmanes y los miembros de otras religiones nunca podrán limpiarse la sangre de sus manos», declaró el líder turco.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios