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La caravana de migrantes, bloqueada en el puente fronterizo entre Guatemala y México. :: pedro pardo / afp
La marcha migratoria fuerza  a moverse a los gobiernos

La marcha migratoria fuerza a moverse a los gobiernos

El presidente electo de México presenta un plan para mejorar la economía centroamericana a Trump, más interesado en levantar su muro

MILAGROS L. DE GUEREÑO CORRESPONSAL

LA HABANA.

Jueves, 1 de enero 1970

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Mientras las autoridades mexicanas rechazaron la irrupción violenta en su territorio de migrantes de la caravana que recorre Centroamérica, Donald Trump descalificó a los miles de 'sin papeles' que se agolpan en la frontera de Guatemala y México. «Son criminales duros, no dije que en todos los casos (...) pero es gente muy, muy dura. Y no los quiero en mi país», afirmó. Recordó en este sentido que su muro avanza y estará listo en un año.

Por su parte, el mandatario electo de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), informó de que ha presentado al magnate un plan para invertir 26.000 millones de euros en mejorar la economía centroamericana. De este modo, busca reducir las ansias de sus pobladores de buscar horizontes más prósperos en el norte del continente.

El presidente de Honduras, nacionalidad de la mayoría de los integrantes de la caravana, Juan Orlando Hernández, viajó ayer a Guatemala, donde se reunió con su colega Jimmy Morales para establecer una estrategia coordinada de regreso de los migrantes que hace hoy ocho días comenzaron la marcha para llegar a EE UU. Según medios locales, la marcha ha crecido y suma ya entre 4.000 y 5.000 personas. Gerardo García Benavente, comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM) de México, informó de que están tramitando las primeras 250 peticiones de refugio que deben ser respondidas en 10 días. Benavente indicó al respecto que en lo que va de año han detectado solicitudes de 246 personas con condenas en su país de origen.

Diálogo con la caravana

La tarde del viernes, cientos de indocumentados se parapetaron detrás de mujeres y niños. Lanzaron piedras y derribaron vallas policiales para entrar en México por Ciudad Hidalgo (Chiapas), dejando varios heridos entre los uniformados. Según las autoridades, ayer la situación ya estaba controlada. Enrique Peña Nieto reaccionó con un mensaje al país. «México no permite ni permitirá el ingreso irregular y violento de migrantes», enfatizó el presidente saliente, quien agregó que ha indicado a los Ministerios que mantengan el diálogo con la caravana en favor de la seguridad.

Por su parte, Trump agradeció el esfuerzo mexicano. «Como saben, justo ahora México trabaja en su frontera sur. Están luchando contra algunas personas malas en este grupo. Vemos a la gente entrar. Y si escuchan a los 'medios falsos', pensarán que son personas maravillosas (los migrantes)». Y volvió a la carga con el muro: «Quiero construirlo todo de una sola vez. Podemos hacerlo en un año», afirmó.

Mientras, cientos de hondureños acampan tumbados en el suelo a la espera de poder ingresar en México, aunque algunos ya consideran volver a su país. Y más al conocer la propuesta de AMLO de crear empleos, similar a la impulsada por Franklin D. Roosevelt tras la Gran Depresión de 1929.

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