La Guardia Civil consigue identificar a los autores de una agresión homófoba cometida hace nueve meses en Pizarra

La Guardia Civil ha catalogado la investigación de «compleja», ya que había muy pocos datos sobre los presuntos agresores. Tras varias pesquisas se consiguió identificar a dos de los atacantes, contra los que han actuado. Se les imputan un delito de odio por la orientación sexual y tres delitos de lesiones, fruto de las diversas heridas que sufrió la víctima.

Durante la agresión, según han informado desde la Guardia Civil, la víctima llegó a perder la consciencia y tuvo que ser trasladada a un centro hospitalario. Fueron dos testigos de los hechos los que lo llevaron de forma particular ante la gravedad de las lesiones. Según se recoge en la investigación, cuando estas dos personas trataron de ayudar en primera instancia al agredido, pero los atacantes la emprendieron a golpes con ellos, que no pudieron hacer nada hasta que se marcharon.

Este caso tuvo un importante impacto tanto en la localidad de Pizarra, por ser donde se produjeron los hechos, como en Coín, donde residen los investigados. De hecho, el agredido denunció en las redes sociales las lesiones que le provocaron

Las investigaciones han sido llevadas a cabo por componentes de los Puestos de la Guardia Civil de Álora y Pizarra, con la colaboración del Equipo de Policía Judicial de Coín.

Esta no es la primera agresión homófoba que se denuncia en la provincia de Málaga en lo que va de año. El pasado mes de abril, una de las 'drag-queen' más conocidas de Torremolinos, Satín Greco, denunció que un grupo de jóvenes le agredió, le pegó y le intentó robar. Los hechos se reportaron durante la madrugada un viernes a un sábado, cuando la víctima salía de trabajar de una discoteca del barrio de La Nogalera.

Tal y como se denunció en su momento, la agresión a Satín Greco también se perpetró en grupo, a manos de varios jóvenes extranjeros que, antes de golpearla le llamaron «maricón» y otros insultos, tal y como ya publicó SUR a raíz de estos hechos.

Los trabajadores del bar en el que la 'drag-queen' había estado trabajando esa noche salieron a la calle al darse cuenta de lo que estaba ocurriendo, lo que hizo que los agresores se marchasen de la zona, hecho que no consiguieron los testigos de la agresión en Pizarra.