Instalada en Toledo la primera planta agrovoltaica inteligente de España

En concreto, seguidores controlados con un algoritmo de inteligencia artificial determinan en cada momento la posición óptima de las placas solares colocadas sobre las vides. El grado de inclinación se establece en función de la información recogida por los sensores colocados en los viñedos que registran datos como la radiación solar, la humedad de la tierra, las condiciones de viento o el grosor del tronco de la vid.

De esta forma, la instalación contribuirá a mejorar la calidad de la uva, permitirá un uso más eficiente del terreno, reducirá el consumo de agua de riego y mejorará la resistencia de este cultivo a las condiciones climáticas ante el aumento de las temperaturas y las olas de calor, que cada vez son más frecuentes.

La producción de esta planta piloto, de 40 kilowatios de capacidad, se destinará íntegramente al autoconsumo de las bodegas González Byass y Grupo Emperador, que también podrán reducir sus emisiones contaminantes, avanzar en la descarbonización de su actividad y disminuir sus costes energéticos. Iberdrola monitorizará a lo largo del próximo año los resultados de este proyecto, denominado «Winesolar», con la intención de implantar más plantas agrovoltaicas inteligentes en otras explotaciones vinícolas en España, país que concentra el 13% de los terrenos cultivados con viñedos del mundo.