Un copropietario del hotel Cortijo La Reina, declarado culpable de su quiebra

Dicho concurso de acreedores ha sido declarado culpable (y no fortuito) por la magistrada Isabel Conejo al comprobar que existen causas de culpabilidad que han sido debidamente acreditadas, como son «la falta de diligencia en la llevanza de los libros obligatorios, la salida fraudulenta de la explotación del hotel y no depositando las cuentas». «Este comportamiento unido a la falta de colaboración con la administración concursal ha contribuido necesariamente a la agravación de la insolvencia«, añade la jueza en la sentencia de calificación.

El déficit concursal, es decir, la diferencia entre el valor de los bienes que quedan en la sociedad y las deudas reconocidas por el juzgado, es de algo más de 2 millones de euros, según su administrador concursal, Juan Carlos Robles. Asimismo, la magistrada condena a Germán Antonio Bautista, antiguo empleado del hotel, como cómplice del concurso culpable, al haber contribuido a desviar la totalidad de los ingresos derivados de la actividad hotelera a través de una sociedad de la que era admnistrador único.

Además, García Calero está siendo investigado por denuncia falsa por el Juzgado de Instrucción número 1 de Málaga por haber interpuesto una querella por administración desleal contra el citado Juan Carlos Robles en 2015. Dicha querella provocó la apertura de unas diligencias previas en las que se imputaba a éste un delito de administración desleal en sus funciones como administrador concursal del hotel. Tras la instrucción del procedimiento, fue archivado mediante en enero de 2017.

Según explica Robles, el motivo que adujo el empresario para presentar aquella denuncia fue el reconocimiento dentro del proceso concursal de un crédito a Unicaja que se había otorgado en escritura pública en 2011 tres años antes del concurso. «El propietario del hotel me acusó de aceptar una certificación de un acta de junta de socios, firmada por otra administradora, que era falsa, pero durante la instrucción se acreditó que existía esa misma certificación de acta firmada por el propio denunciante.Todo ello con el único objetivo de obtener una imputación de mi persona y posterior escarnio público», argumenta el administrador concursal y decano del Colegio de Economistas de Málaga.

Una vez se archivó aquella denuncia, Robles presentó una querella contra García Calero, que se admitió a trámite el 11 de septiembre de 2019, incoándose como diligencias previas la toma de declaración a denunciante y denunciado.