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Aceite de primera cosecha o molturación temprana de Finca la Torre. A. PELÁEZ

Finca la Torre descubre el secreto de su aceite

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Domingo, 13 de octubre 2019, 00:36

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La primera campaña de Finca la Torre fue en 2012 y desde entonces no ha dejado de cosechar galardones. Tanto que se puede decir que ha obtenido desde entonces los mayores reconocimientos internacionales. Por lo pronto es la única almazara que ha logrado cinco años consecutivos el Premio Alimentos de España que concede el Ministerio de Agricultura, lo cual es ya todo un hito. Además ha sido dos veces finalista. Y la guía más prestigiosa a nivel mundial, Flos Olei lo ha elegido en su edición de 2020 entre los mejores del mundo. Finca la Torre ha sido uno de los siete aceites de oliva virgen extra que ha obtenido cien puntos sobre cien. Flos Olei elige todos los años los 500 AOVEs mejores a nivel mundial.

La lista de premios, menciones y galardones de Finca la Torre supera el medio centenar. Sólo en la campaña 2017/18 cosechó un total de quince.

Para el director gerente de Finca la Torre, el ingeniero agrónomo Víctor Pérez, el secreto de este palmarés es «contar con trabajadores cualificados y poner empeño y cariño en los que hacemos, aunque está claro que todo tiene que ir acompañado de un cierto conocimiento. Pero la clave es el empeño, la dedicación, la finca y el tiempo. Es un compendio de muchas cosas, la suma de muchos detalles».

Además Pérez deja claro que la apuesta de Finca la Torre siempre ha sido la calidad. «Sin pensáramos en rendimientos, no habríamos llegado a donde hemos llegado. Aquí nos vamos a rendimientos bajitos y sólo embotellamos lo mejor de lo mejor», explica. La mayoría de las almazaras malagueñas (en Málaga existen unas 77) no comenzarán al molturar hasta finales de octubre, cuando el rendimiento de aceituna es mayor. De momento, las únicas que han comenzado a elaborar aceite son las consideradas premium.

Finca la Torre se encuentra enclavada en Bobadilla (Antequera) y es propiedad de la empresa sueca, Agrifutura Holding AG de Suiza. Cuenta con 380 hectáreas, de las que sólo 230 son de olivar (unos 33.000 olivos). De estas, 120 hectáreas son de olivar tradicional, con marcos de plantación que no superan los 75 árboles por hectárea. El resto es olivar en intensivo (250 árboles por hectárea). El 75% de la plantación es de la variedad hojiblanca. El resto son de arbequina, picudo y cornicabra.

La empresa practica la agricultura biodinámica, que tiene en cuenta las fases lunares, la fauna y flora de su finca, y que utiliza el orujo, los retos de poda y el estiércol de las cabras y ovejas que pastan en la finca para abonar los olivos.

Finca la Torre elabora su aceite con aceituna temprana, cuando está aún verde. Aunque su rendimiento es bastante menor, con ello se garantiza la obtención de un aceite intenso, con más aromas, picante y amargo, y un color verde espectacular, factores que revelan su alto contenido en polifenoles y antioxidantes. «En los últimos cuatro años hemos realizado tres modificaciones para mejorar nuestra calidad, tanto para agilizar la recogida como la molturación. Molturamos la aceituna recolectada en una hora o hora y media. Para ello hemos instalado una línea doble de molturación», explica el director Comercial, Borja Adrián Sanz en una jornada de puertas abiertas a hosteleros de la Costa del Sol organizada en colaboración de la distribuidora de vinos Lara.

La almazara sólo vende con su marca el aceite obtenido con su propia cosecha de aceituna. Esta es transportada a la fábrica casi de inmediato. Una vez en la almazara, se le retiran los retos de ramas y hojas y se procede a su lavado, pasando entonces a ser molturada. La pasta resultante es conducida a una batidora, donde los aceites se juntan y toma los aromas. Después la masa pasa a una centrifugadora horizontal que separa los sólidos –orujo– de los líquidos. En una segunda centrifugadora vertical se separa el aceite del agua. Todo ese proceso se lleva a cabo en una hora o una hora y medio máximo. El aceite pasa entonces por una filtradora que se encarga de eliminar el resto del agua. Se trata de un proceso de extracción en frío. El aceite es introducido en depósitos con control de temperatura en bodega para su embotellado posterior, estando listo para consumir.

Este año como novedad, Finca la Torre lanza una edición limitada de su aceite de primera cosecha o molturación temprana en botella transparente con protección ultravioleta, del que se han elaborado 2.000 botellas de la variedad arbequina y otras 2.000 de hojiblanca, que se presentará este lunes 14 en Madrid.

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