Waterpolo Málaga, un equipo joven, con garra y actitud positiva

Tanto capitán como entrenador coinciden en el «buen trabajo del día a día» y «en la buena actitud de los jugadores». El inicio de esta nueva temporada no parecía tarea fácil en el grupo después de cinco bajas importantes, pero la vuelta de algunos veteranos y la incorporación de juveniles y cadetes ha hecho recuperar la ilusión y las ganas de competir en el Waterpolo Málaga. Uno de los protagonistas que ha llegado de vuelta ha sido el portero, Jaime Cisneros, que después de tres temporadas retoma la actividad con el equipo y también trabaja como entrenador de categorías inferiores del club. «Él es de la casa y ha vuelto con mucha ilusión», apunta el presidente. Igual que Pablo Arroyo, que tras formarse desde pequeño en el club, regresa este curso.

«La cantera viene pisando fuerte», asegura Kubicsko. A causa de las bajas, el equipo ha tenido que recomponerse con los jugadores del club y eso, como dice su entrenador, casi siempre suele tener una virtud: «Llegan con mucha actitud, ganas y madurez para empezar a competir en el absoluto». Y además, compensados con el grupo de veteranos del grupo, uno de ellos su capitán, Wucherpfenning, que no duda que de ellos también depende la evolución de estos jóvenes. «Está en manos de los que tenemos más experiencia, para que los jugadores sepan encontrar su sitio y cuál en su rol en cada momento», destaca.

La segunda cita de la temporada está al llegar. Mañana sábado el Club Waterpolo Málaga estará en Barcelona para enfrentarse al CN Poble Nou, equipo que acaba de ascender. «No pensamos más allá de cada entrenamiento o partido», puntualiza Peter Kubicsko. Por su parte, el capitán analiza el encuentro: «No conocemos mucho al equipo, pero nos da igual el grupo que se nos ponga por delante, sean mejores o peores. Lo importante es que vamos con confianza y ganas propias», resalta Wucherpfenning.

El primer partido en su feudo, las instalaciones de Inacua, se hará esperar un poco más. Será el próximo 22 de noviembre cuando el conjunto malagueño estrene la temporada en casa y se batirá en duelo ante el cuadro ceutí CN Caballa. «Tenemos muchas ganas de poder jugar delante de nuestra afición, en casa siempre es mejor», reconoce Kubicsko. Aunque con los cambios a los que se están viendo sometidos los aforos a causa del Covid-19, como dice su capitán, «a día de hoy no sabemos si podrá venir público».

Así lo confiesa su presidente, Alfonso Wucherpfenning: «Ahora mismo estamos en los mejores números de la historia del club. Tenemos alrededor de 180 jugadores». Y es que la situación de la pandemia ha hecho que el club malagueño se refuerce y busque más apoyos y, efectivamente, al final el esfuerzo ha acabado dando sus frutos. «Tenemos un vínculo muy fuerte, trabajo y mucha historia», explica Kubicsko. Además, todos estos pequeños que siguen incorporándose a la práctica del waterpolo son los que finalmente jugarán en las filas del absoluto: «Nos gusta crear equipo apostando por las nuevas generaciones, que en los próximos años sigan incorporándose nuevos jugadores», añade el presidente y capitán. En estos últimos días, Alfonso Wucherpfenning ha visto una imagen que asegura que no se le va a olvidar. «Hubo un entrenamiento en el que había más jugadoras en el grupo de chicas que en el de chicos. Llevamos muchos años trabajando en equipos femeninos y este año hemos conseguido tener representación femenina en casi todas las categorías», concluye.