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Damián Quintero regresa al desértico Centro de Alto Rendimiento de Madrid

Damián Quintero regresa al desértico Centro de Alto Rendimiento de Madrid

El malagueño, uno de los primeros deportistas en regresar a las instalaciones de la capital, bromea: «He tenido doscientos mil metros cuadrados para mi, ahora cambia la historia»

marina rivas

Lunes, 18 de mayo 2020, 21:49

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Aunque Madrid todavía no ha pasado a la fase uno, este lunes 18 de mayo fue un día especial para los deportistas más reconocidos y residentes en la capital, porque reabría sus puertas el Centro de Alto Rendimiento del Consejo Superior de Deportes. Un complejo que, en un escenario normal vería pasar a diario miles de deportistas de diversas disciplinas olímpicas y que este día apenas han ocupado una decena de nombres. Entre ellos, el gimnasta internacional Ray Zapata, la jugadora de baloncesto de la Selección María Conde y también un malagueño, el karateca Damián Quintero.

El número uno del 'ranking' mundial de katas y ya clasificado para los Juegos Olímpicos de Tokio 2021 residía en los apartamentos anexos al CAR como becado de las instalaciones, pero tras el desalojo, pasó a vivir con su pareja en Madrid. Desde entonces, pasa la cuarentena en una piso en el que consiguió habilitar un pequeño espacio disfrazado de tatami, donde se ha entrenado estos dos meses. Este lunes, con la noticia de la apertura del CAR, no pudo esperar a volver. Así relata su vuelta: “He ido a hacer el análisis médico y también he rellenado un cuestionario con preguntas que te hacen en el centro médico para darte el apto o no apto y en cuanto me han dado el apto, por la tarde he ido a entrenar el CAR y he seguido el mismo sistema de siempre", explica para SUR. "Me he conectado por videoconferencia con mi entrenador Jesús del Moral y lo bueno es que he tenido doscientos mil metros cuadrados para mi, así que cambia la historia”, cuenta en tono jocoso.

También siguió los protocolos del centro: toma de temperatura a la entrada, así como su identificación, uso de guantes, mascarilla y desinfectante dentro del módulo que ha tenido en exclusiva para él. “Estaba muy desolado aquello. Yo he estado desde las 17.00 hasta las 19.00 horas. Yo entreno en el mismo pabellón que Lidia Valentín y Carolina Marín y me dijeron que era el primero que entraba allí", asegura. No coincidió con ningún compañero pero sí tuvo una visita ilustre, la de la Secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano.

Un paso más cerca para retomar la normalidad ante un calendario rodeado todavía de mucha incertidumbre. Tal y como explicó hace unos días a SUR, Quintero, aunque cuenta con la tranquilidad de tener la plaza olímpica, espera poder disputar alguna que otra competición antes de Tokio para recuperar el tono y las sensaciones. Aunque paso a paso, antes de pensar en el futuro, se centra en su próximo entreno este martes. Eso sí, aunque vuelve motivado al tatami, es consciente de que debe moderar su energía: “Se nota el cansancio, es muy distinto entrenar en un tatami de competición y con una intensidad más alta". Y añade: "Hay que tener mucho cuidad por el peligro de lesiones. Ya a partir de el martes vuelvo a ir por la mañana para hacer la parte física en gimnasio, que será estupendo”.

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