Damián Quintero: «Soy de la Feria de Málaga desde siempre y me gusta la del Centro, la auténtica»
Este es uno de los veranos más esperados de Damián Quintero. Tras varios años sin parar en la carrera por los Juegos Olímpicos, el medalla ... de plata en kata en Tokio, al fin podrá tener una pausa para desconetar y afrontar con más ganas sus próximos proyectos como deportista consagrado, y también como incipiente emprendedor. Se declara amante de las playas de Torremolinos y de la Feria de Málaga. Huye de extravagancias y se siente afortunado con un tinto de verano y en un chiringuito. Aunque reconoce que le cuesta desconoctar, sobre todo por los nuevos proyectos que tiene ya cerrados como un gran evento de karate en la playa para septiembre.
–¿Cómo va su verano?
-Mi verano empezó aún con mucho trabajo, con entrenamientos y el campeonato del Mundo en Estados Unidos, pero ahora ya estoy de vacaciones e intentando despejarme bastante porque vengo de un año muy cargado porque en el pasado, con los Juegos Olímpicos, apenas pude descansar. Esta vez si podré parar y hasta septiembre no retomo, así que estaré un mes y medio más o menos sin competir. En agosto ya empezaré con la pretemporada por mi lado, pero hasta septiembre no vuelvo a Madrid.
-¿De qué forma se organiza las vacaciones?
-Las primeras semanas paro completamente. A veces tengo algunas cosas puntuales como un seminario en Italia que hice hace una semana y algún acto. Pero cuando toca descansar lo intento hacer bien. Me voy a la playa, me tumbo y no hago nada. Aunque es verdad que cuando ya llega agosto y llevo dos semanas sin movermeel cuerpo me pide empezar a moverme y acondicionarme.
-¿Cómo desconecta?
-Pasando gran parte del tiempo con la familia, que son los que menos veo durante el resto del año. Luego hago algún viaje. Esta vez voy a ir a Egipto porque aún le debo la luna de miel a mi mujer. Aunque no cuenta como tal, podremos irnos tranquilos a disfrutar. Luego iré con mi familia política, así que me repartiré entre Torremolinos y Gijón, de donde es mi mujer. Pero el verano lo acabaré en Torremolinos porque hemos organizado un evento de kárate en la playa. Por lo demás intentaré despejarme, comer bien y relajarme con algunos tintos de verano. Creo que es muy importante despejar la mente y siempre que lo he conseguido me ha venido genial. Con dos semanas de parón no me resiento a nivel físico y recupero pronto, pero mentalmente me es más difícil parar. Tengo la intención de disfrutar y no pensar en todos los proyectos que tengo a partir de septiembre. Por eso me gusta estar mucho con la familia y no estar tanto con la gente con la que llevo todo el año hablando sobre kárate.
-Veo que es de ir mucho a la playa, ¿cuáles son sus favoritos?
-Pues no me muevo mucho y apenas salgo de Torremolinos. Cuando me apetece algo más familiar, chiringuito con pescaíto y espetos tranquilo voy a La Carihuela. Si esa tarde queremos música y un ambiente más 'chill out', pues vamos a Los Álamos. No tengo que irme muy lejos porque soy de un destino de vacaciones.
-¿Hace algo especial?
-Intento que no porque busco la cotidianidad. Al final me tiro todo el año viajando y visitando muchos países diferentes. Para mi en verano lo que me llena es parar y encontrar un ambiente más familiar y normal. Me gusta hacer algún viaje junto a mi mujer, pero básicamente me centro en lo típico con la familia y no busco hacer muchas cosas extravagantes.
-Tomarse un tinto de verano...
-Para mi eso es extraordinario, claro. Durante todo el año apenas bebo y cuando de repente me puedo relajar quiero disfrutar. Y aquí en Málaga disfruto mucho. Me gusta ir mucho al Centro y este año lo que estoy esperando con muchas ganas es la Feria. Después de dos años sin ella no me la pierdo y vengo al menos dos días, seguro. Soy de la Feria de Málaga desde siempre y me gusta la del Centro, que es para mi la auténtica. Luego, a veces, también me paso por el Cortijo de Torres, pero sobre todo me gusta la fiesta durante el día. Lo disfruto mucho. Estaré por esa fecha en Asturias, pero ya he hablado con mi mujer que tenemos que bajar esos días. No hay ni negociación (ríe).
-Y pondrá el colofón a su verano con un evento de kárate muy novedoso en Torremolinos, ¿de qué se trata?
-Es una idea que surge por la intención de sacar nuevos proyectos relacionados con el kárate. Yo estoy acostumbrado a dar seminarios y siempre son en pabellones. No es que sea frío, pero es lo normal. Entonces, teniendo lo que tenemos en Málaga, como es la playa, pues hemos sacado adelante un evento que se va a denominar 'Kárate Beach Training'. Haremos unos tatamis de arena en Torremolinos. Habrá carpas, músicas, buen ambiente, comida... Será durante tres días y el objetivo es entrenar karate y kumite. Tengo mucha gente inscrita de muchos países. Vienen de Rumanía, Polonia, Francia, Italia y Portugal. Espero entre 150 y 200 karatecas. Es cierto que no será un ámbito de competición, sino algo más distendido y de convivencia con grandes campeones de Europa y del Mundo.
-¿Hay precedente de esto?
-Nada, no se ha hecho nunca un evento así. Lo organizaré junto al Ayuntamiento de Torremolinos y espero que sea la primera edición de muchas. Seguro que la gente cuando lo vea lo va a flipar.
-Me decía que la temporada siguiente será intensa por la competición y su incipiente carrera de empresario, ¿qué se avecina?
-Una de las cosas era empezar a lanzar un evento como el Kárate Beach. Tengo más cosas en la cabeza, pero obviamente seguiré colaborando con diferentes marcas. Pero por supuesto sigo en activo y compitiendo. El próximo campeonato de Europa será en Guadalajara y me hace mucha ilusión competirlo. Puede ser uno de los últimos y será muy especial. También intentaré vivir mis terceros Juegos Europeos, que es otro de los torneos más importantes. Iré paso a paso. No me retiro, pero tampoco quiero decir que me quedan cuatro o cinco años más. Mientras tenga ganas y me enfade no ganar seguiré.
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