El Atlético vuelve a estrellarse contra el Girona

Sin tiempo para lamerse las heridas de una derrota inesperada en los primeros 80 minutos del encuentro, con el gol en propia meta de Miguel Ángel Moyá y el tanto del argentino Joaquín Correa que hacían inútil el primer gol del hispanobrasileño Diego Costa, el Atlético vuelve al Wanda Metropolitano a recibir a un rival a priori inferior pero que demostró en la primera vuelta ser capaz de dar sorpresas.

Inicia la segunda vuelta el Atlético contra un rival con el que no hicieron un buen partido en la jornada inaugural del campeonato en Montilivi, donde el Atlético recibió dos tantos del uruguayo Christian Stuani en los primeros 25 minutos del encuentro, aunque supo remontar con goles del argentino Ángel Correa y el uruguayo José María Giménez. Los rojiblancos no tienen margen de error en LaLiga Santander si quieren limar los nueve puntos de diferencia que les lleva el líder, un Barcelona que visitará el Benito Villamarín contra un Betis en crecida tras encadenar dos triunfos consecutivos, uno de ellos el derbi sevillano en casa ajena.

También le urge al Atlético recuperar la senda en su nuevo estadio, el Wanda Metropolitano, que vivió su primera derrota contra un equipo español el pasado miércoles ante el Sevilla, ya que el único equipo que se había llevado el triunfo hasta esta semana era el Chelsea inglés, también con un 1-2 en los minutos finales. Con Diego Costa apto para volver a la competición liguera después de cumplir ante el Eibar su sanción por la doble amonestación ante el Getafe -la segunda por celebrar con el público- el Atlético recupera al jugador más determinante hoy por hoy en su ataque. Un futbolista que amplía de forma exponencial las posibilidades ofensivas del plantel.

Junto a él retornarán Gabi Fernández y el defensor montenegrino Stefan Savic, ambos suspendidos ante el Eibar, y no podrán estar ni el uruguayo Diego Godín, sancionado por acumulación de amonestaciones, ni el lateral brasileño Filipe Luis, aquejado de una tendinopatía aquilea izquierda que provoca la continuidad de su baja, por la que ya se ha perdido los cinco partidos de este 2018.

El resto del equipo se parecerá al titular ante el Sevilla en la Copa, con el regreso del meta esloveno Jan Oblak al arco, la inclusión del croata Sime Vrsaljko en la banda derecha, el uruguayo José María Giménez en el centro junto a Savic y el francés Lucas Hernández como lateral izquierdo. El centro del campo contará con Saúl Ñíguez y 'Koke' Resurrección junto a Gabi, aunque el ghanés Thomas Partey podría tener sitio para dar descanso al capitán con vistas a la Copa.

El puesto restante en el centro del campo se dirimirá entre el canario Víctor Machín 'Vitolo', que hizo una buena primera mitad ante su exequipo el miércoles, o el argentino Ángel Correa, que le sustituyó y aportó velocidad en el ataque. El francés Antoine Griezmann, sin gol en los últimos quince días, desde la ida de octavos de Copa contra el Lleida, aunque autor de las últimas asistencias ligueras, acompañará a Diego Costa en la punta del ataque rojiblanco.

El Girona llega a Madrid con sensaciones inmejorables tras superar al Las Palmas por 6-0 en la que es, hasta la fecha, la mayor goleada de la temporada en Primera división. Los futbolistas de Pablo Machín, que en estos momentos ocupan el décimo lugar de la clasificación, buscarán acercarse un poco más al objetivo de la permanencia y volver a puntuar lejos de Montilivi tras dos derrotas seguidas, en Eibar y en Valencia.

Motivos para creer en la victoria no le faltan al conjunto rojiblanco, ya que, además de ser el séptimo mejor visitante de la liga, es el único equipo que ha perforado dos veces en un mismo partido la portería del esloveno Jan Oblak, el Zamora de la competición. De hecho, en el encuentro de la primera jornada, el que supuso el debut histórico del cuadro de Montilivi en la máxima categoría, el Girona marcó dos de los ocho tantos que ha encajado la férrea defensa del Atlético esta temporada, o lo que es lo mismo: el 25%.

En aquel partido, el autor de los dos goles gerundenses fue Cristhian Stuani, que aún no está plenamente recuperado del traumatismo craneoencefálico que sufrió en el partido contra el Las Palmas y se ha quedado fuera de la convocatoria.

En lugar del delantero uruguayo, el pichichi del equipo con diez goles en 17 partidos, la referencia ofensiva visitante será el keniano Michael Olunga, que en la última jornada se convirtió en el primer futbolista del Girona en marcar un hat-trick en Primera y en el primer keniano en celebrar un gol en la elite del balompié español.

Además, las otras novedades en el once de Machín podrían ser la entrada de Marc Muniesa por Jonás Ramalho y de Pablo Maffeo por Aday Benítez, dos futbolistas, éstos últimos, que se están a un solo paso de la quinta tarjeta amarilla, igual que Juanpe, Johan Mojica, David Timor y Douglas Luiz.

Atlético de Madrid: Oblak, Vrsaljko, Giménez, Savic, Lucas, Correa o Vitolo, Gabi o Thomas, Saúl, Koke, Griezmann y Diego Costa.

Girona: Bono, Pablo Maffeo o Aday Benítez, Juanpe, Bernardo Espinosa, Marc Muniesa o Jonás Ramalho, Johan Mojica, Pere Pons, Àlex Granell, Borja García, Portu y Michael Olunga.

Árbitro: Ricardo De Burgos Bengoetxea (Comité Vasco).

Estadio: Wanda Metropolitano.

Horario: 16:15.

TV: beIN LaLiga.

Sumó el Atlético su segundo pinchazo de la semana en el Wanda Metropolitano al no pasar de las tablas ante el Girona. Los de Diego Simeone, que venían de caer en ese mismo estadio ante el Sevilla en la ida de los cuartos de Copa del Rey, sufrieron frente al correoso conjunto de Pablo Machín de un modo similar al de la primera vuelta y cosecharon un nuevo empate pese a adelantarse en el marcador por medio de Antoine Griezmann. Un nuevo tropiezo que pone al Barcelona en disposición de acabar la jornada con once puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor si vence el domingo al Betis en el Benito Villamarín.

De pocas ocasiones dispusieron ambos equipos en los primeros quince minutos, donde solo hubo un lejano disparo de Griezmann. La escasez de ideas a la hora de elaborar juego reflejó un partido de bajo ritmo donde el Atlético fue ganando protagonismo con el paso de los minutos y frenó con facilidad los intentos de contraataque del Girona, que pretendía salir rápido en transición tras cada recuperación.

En esa misma dinámica, la de las rápidas salidas tras robo, encontró el cuadro del Cholo Simeone sus dos mejores oportunidades de la primera mitad. En la primera, Yassine Bono le hizo un paradón al argentino Ángel Correa en un mano a mano, que lo intentó superar por arriba. En la segunda, se abrió el marcador. Clave tanto en ambas jugadas como en el devenir del encuentro fue Thomas Partey. El ghanés, que sobre todo durante los primeros 45 minutos se mostró por encima del nivel de sus compañeros, picó el balón hacia un perfecto desmarque de Diego Costa, que le regaló el gol a Griezmann con una dejada de cabeza justo antes de recibir un fuerte golpe del guardameta del Girona, muy desafortunado en su salida.

El hispano-brasileño, errático en el pase pero acertado en el resto, permaneció una hora sobre el césped y fue sustituido por el francés Kevin Gameiro, que no tuvo ni por asomo la incidencia del delantero de Lagarto, siempre aportando desmarques a la espalda de la defensa y luchas en cada balón dividido.

Por su parte, el Girona no cuajó un buen primer tiempo y solo fue capaz de rematar una vez. Su única ocasión llegó en el minuto de descuento, donde Portu no fue capaz de conectar su remate tras una falta provocada por Thomas, que se llevó la cartulina amarilla. En la segunda mitad, se vio obligado Machín a realizar su primer cambio por los problemas físicos de Bono y dio entrada a Gorka Iraizoz, que al igual que el titular, detuvo un uno contra uno clave para el devenir del encuentro.

Con el 1-0 momentáneo, parecía más cerca el segundo gol de los atléticos que el primero del cuadro catalán. De hecho, pese al gran número de faltas del encuentro, el balón parado no había influido apenas en el mismo. Sin embargo, de ahí nació el empate de los visitantes. El siempre peligroso balón parado del Girona que había sido mitigado por Jan Oblak, que blocó todo esférico factible que se paseó por su zona de incidencia, acabó produciendo un mal rechace y un balón suelto que rondaba por el área rojiblanca y que aprovechó Portu con un remate acrobático para colocar el empate definitivo.

Quedaba entonces más de un cuarto de hora de partido. El Cholo, que había dado ya entrada a Koke y descanso a Griezmann, sustituyó al lateral croata Sime Vrsaljiko, que estuvo a punto de ver la segunda cartulina amarilla en la falta que originó el gol del Girona, por Vitolo en el minuto 80 para revertir la situación. No fue suficiente. En los diez minutos restantes el Atlético no fue capaz de crear peligro para la portería de Iraizoz y cerca estuvo de salir peor parado con las rápidas carreras a la contra del keniata Michael Olunga, que forzó una tarjeta para Oblak en el último minuto del tiempo reglamentario en una clara ocasión que no logró materializar para sellar la victoria.