El Barça lidera el desplome de los límites salariales

La entidad azulgrana ha visto reducida en casi un 50 % su capacidad económica para las fichas de su primer equipo, pues pasa de los 671,429 millones de euros de tope salarial para la campaña 2019-20 a los 382,717 del presente curso. Un auténtico tijeretazo de casi 289 millones que explica el hecho de dejar salir en el último mercado de verano a futbolistas importantes como Luis Suárez, Arturo Vidal o Ivan Rakitic a coste cero o prácticamente nulo y que habla a las claras de la necesidad que hay en el club catalán de pactar con la actual plantilla, marcada por contratos astronómicos como el de Messi, una nueva reducción salarial.

El drástico descenso del Barça se enmarca en una tendencia general descendente entre todos los grandes clubes españoles, pero es mucho más acusada que la del Real Madrid, que también baja desde los 641,049 millones del curso pasado a los 468,529 actuales, con una pérdida de casi 172,5 que resulta bastante menos dramática a tenor de los números de su eterno rival y que le permite situarse al frente en cuanto a capacidad de gasto en fichas. Mientras, el Atlético se mantiene en el tercer cajón del podio, con un límite salarial de 252,72 millones de euros, casi 96 menos respecto a los 348,5 de la pasada temporada.

Entre los clubes Champions el Sevilla es con mucho el mejor parado, pues precisamente el hecho de pasar de disputar su querida Europa League a codearse con los grandes del continente en la Liga de Campeones le permite no sólo mantener íntegro su tope salarial, sino incluso incrementarlo aunque de forma apenas simbólica, pues pasa de 185,166 a 185,809 millones de euros.

En el lado contrario, el Valencia, precisamente el club que deja su plaza Champions al Sevilla. El club de Mestalla pasa de un tope salarial de 170,67 millones a los 103,39 de la presente temporada, un recorte que le sitúa en el séptimo puesto y ha llevado a la salida de jugadores básicos como Parejo, Rodrigo Moreno, Ferran Torres, Coquelin o Kondogbia, en un éxodo que obliga al equipo valencianista a modificar sustancialmente sus objetivos deportivos para este curso. Más aún si se tienen en cuenta las subidas de algunos de los que a priori serían sus rivales directos por las plazas europeas.

Villarreal, Athletic y Real Sociedad desafían la tendencia a la baja y ven premiado su buen desempeño sobre el césped y en los despachos con incrementos significativos del límite salarial: de 108,587 a 145,242 millones de euros en el caso del 'submarino amarillo'; de 103,183 a 119,819 en los vizcaínos; y de 81,135 a 100,876 en los guipuzcoanos.

También incrementan su capacidad salarial clubes como Granada, Valladolid, Osasuna, Celta y evidentemente los tres recién ascendidos, Cádiz, Huesca y Elche, con aumentos más que sensibles fruto del salto de categoría, mientras que desciende el límite de Betis, Getafe, Eibar, Alavés y Levante. En Segunda, el Espanyol, un gigante circunstancialmente en la categoría de plata, lidera de largo el tope establecido para los salarios, con un techo de 45,34 millones de euros que supera a los de hasta seis clubes de Primera. Le siguen el Almería de Turki Al-Sheikh, que incrementa su margen salarial de la mano de la inversión del saudí, y los otros dos recién descendidos, el Leganés y el Mallorca.