Así se vivió el clásico en las redes sociales

El Santiago Bernabéu la tomaba después con uno de sus villanos favoritos, Gerard Piqué, que escuchaba la ya tan habitual sinfonía de silbidos. El partido discurría tan plácido para los blaugrana que los seguidores del club catalán acariciaban la idea de un gol del central en el templo madridista.

También había tiempo para ajustar cuentas con los jugadores del Real Madrid, faceta en la que se llevaban la mayoría de los boletos Danilo, Ramos, Bale o Benzema.

Los fans del equipo azulgrana se recreaban con la magia de Andrés Iniesta y eso que todavía no había marcado el centrocampista manchego.

Tampoco podía faltar en un Clásico las jugadas polémicas con Daniel Alves como uno de los protagonistas destacados.

Con el segundo gol del Barcelona, obra de Neymar, los madridistas mostraban sin contemplaciones su disgusto con los jugadores, con especial hincapié en la línea defensiva.

Los vasos comunicantes del Clásico funcionaban con la precisión del mecanismo de un reloj suizo. El creciente enfado de los aficionados blancos con los suyos se tornaba en admiración en la otra orilla blaugrana, que se rendía a los pies del genial 8 azulgrana.

Con el tercer gol, las redes habían encontrado en la figura de Rafael Benítez a uno de sus protagonistas favoritos. Y es que la vida se vive mejor con humor.

Todavía faltaba tiempo para la exhibición de Claudio Bravo ante un desaparecido Cristiano Ronaldo.

El partido finalizaba con los ya clásicos tuits y posts en Instagram de los jugadores en el backstage del vestuario:

Y cuando el clásico parecía que no daba ya más de sí, aparecía un protagonista, esta vez involuntario, José Mourinho de la mano de su hijo.