Se mantiene la huelga tras fracasar el acto de conciliación

Por lo tanto, tendrá que ser la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional la que resuelva en la vista de este miércoles si atiende o no la demanda interpuesta por los clubes profesionales solicitando la anulación de un paro que consideran «ilegal». También podría fallar el Consejo Superior de Deportes, organismo ante el que la LFP solicitó igualmente la suspensión cautelar del paro convocado por los futbolistas y la Federación.

El acto de conciliación, solicitado por la AFE y preceptivo en toda convocatoria de huelga, estaba condenado a fracasar, según avanzó el martes Javier Tebas, presidente de la patronal, tras celebrarse la asamblea extraordinaria de la LFP.

Los clubes están dispuestos a renegociar el convenio colectivo suscrito con los futbolistas, sobre todo en lo que concierne al fondo de garantía salarial para los profesionales de Segunda B, pero no de hablar sobre el Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno el 30 de abril para regular la venta centralizada de los derechos televisivos.

«La LFP está en otra dirección», lamentó tras la fallida conciliación Luis Rubiales, presidente de la AFE. «El colectivo de futbolistas ha planteado que todos los agentes del fútbol lleguen a un acuerdo y que la administración ponga las medidas necesarias para que se implemente, pero en estas circunstancias la Liga no quiere dialogar», añadió.

«Era difícil hoy llegar a algún tipo de acuerdo. Estamos dando más garantías y lo que ofrece la Liga es suficiente para solucionar este conflicto en el ámbito del convenio colectivo», afirmó, por su parte, Tebas, a la salida de la reunión, que se prolongó durante unas dos horas.

Villar, ausente

Curiosamente, la FEF no envió a ningún directivo y estuvo representada sólo por un abogado. «Es bastante triste y eso demuestra lo del castillo feudal que vengo diciendo», comentó Tebas en referencia a Ángel María Villar, presidente federativo.

Tanto los clubes como los jugadores esperan una resolución favorable de la Audiencia Nacional. «Los jugadores están fuertes y confían en que se respete el derecho a la huelga», dijo Rubiales. «Es una huelga trampa, un cierre patonal, ya que la Federación ha cerrado la Liga suspendiendo el campeonato», respondió Tebas.

El presidente del sindicato confirmó que la huelga no afecta de momento a la Copa del Rey, cuya final entre el Athletic y el Barcelona está prevista para el 30 de mayo en el Camp Nou.