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Keylor Navas posa como nuevo jugador del Real Madrid.
Keylor Navas: «Espero que mi llegada no sea negativa»
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Keylor Navas: «Espero que mi llegada no sea negativa»

"Siempre me he fijado en Casillas y Diego López, que han demostrado ser los mejores del mundo", asegura el nuevo portero del Madrid, una dura competencia para el gran capitán ahora empequeñecido

Amador Gómez

Martes, 5 de agosto 2014, 11:22

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«Conmigo el Real Madrid va a tener más alternativas. Espero que mi llegada sea un bienestar para todos y no sea nada negativo», aseguró este martes con excesivo optimismo Keylor Navas, ya que su fichaje supone una dura competencia para Iker Casillas y ha provocado que el club haya abierto la puerta de salida a Diego López para que la guerra de la portería blanca, que se presume cruenta, quede reducida a dos. Al icono del madridismo que fue elegido mejor guardameta del planeta durante cinco años consecutivos pero ahora se tambalea; y a quien este martes fue calificado por Florentino Pérez como «uno de los mejores del mundo, el portero con más paradas de la última Liga (163) y una de las grandes estrellas del Mundial de Brasil».

Con gritos a favor y en contra de Casillas -las críticas van en aumento- durante su presentación oficial por parte de una afición dividida por el debate que abrió José Mourinho y no ha cerrado Carlo Ancelotti, Keylor Navas llegó a manifestar que su ejemplo no sólo ha sido el portero madrileño, sino también el gallego que arrebató la titularidad en la Liga al gran capitán en estos momentos empequeñecido. «Yo siempre me he fijado en Casillas y Diego López, que han demostrado ser los mejores del mundo. Han sido referentes para mi carrera y de ellos puedo aprender muchísimo. Me puede ayudar a crecer como futbolista», afirmó, fiel a su carácter humilde, el guardameta costarricense, quien dice estar «muy tranquilo» ante la polémica situación de la portería blanca.

A la espera de lo que ocurra en la Supercopa de Europa en Cardiff, donde Casillas será titular y se someterá, cuando ha perdido la confianza en sí mismo, a una prueba de fuego, Keylor Navas no piensa en saltar de inmediato al once del Real Madrid. «Mi mentalidad no va a cambiar en ningún momento. Yo voy a entrenar con las mismas ganas, pensando que mi oportunidad de jugar puede llegar. Quiero entrenar, esforzarme y aprender, que es lo más importante en estos momentos. Cuando uno se esfuerza y trabaja las cosas salen bien, y espero que en el Madrid las cosas sean mejor que anteriormente», respondió cuando se le preguntó si le inquieta el conflicto generado bajo los palos. Antes de entrenarse ya por la tarde en Valdebebas junto a sus dos compañeros y rivales, el exportero del Levante comentó: «No he tenido la oportunidad de hablar con Iker ni con Diego, pero son muy profesionales, grandes personas, y me van a recibir bien».

Incluso cree que puede coincidir con ambos guardametas la próxima temporada, cuando el Madrid desea que Diego López (12 millones de finiquito) abandone ya el club, mientras él, con 27 años, proyecto de futuro y presente, ha firmado para las seis próximas temporadas, con un sueldo de 2,5 millones anuales. Creyente y practicante, Keylor Navas se refirió en varias ocasiones a la providencia divina y agradeció que le haya llevado al «mejor equipo del mundo»: «Puse todo en manos de Dios, para que la oportunidad se diera, y gracias a él estoy aquí sentado. Llegar al Real Madrid es algo que siempre había soñado. Yo siempre he sido una persona de tener mucha fe, por lo que estaba muy tranquilo. Si iba a venir aquí, sabía que las cosas se iban a dar, igual que si tenía que seguir otro año en el Levante».

Estuvo Keylor Navas precavido y modesto, tanto en su breve discurso en el palco de honor del Bernabéu -se despidió con un tímido grito de «¡Pura vida...! ¡Y hala Madrid!», como en la posterior conferencia de prensa, pero también tuvo algún lógico destello de autoestima y fortaleza mental, cuando espetó: «Si estoy aquí no es porque salió un numerito de la lotería. Me siento capaz de afrontar estos retos. El trabajo me respalda, y cuando uno trabaja, se siente preparado para afrontar cualquier tipo de reto».

«Desde que llegué a España (al Albacete, en 2010) he intentado dejar en lo más alto mi país, ser profesional, buena persona y ser ejemplo», apuntó el héroe de Costa Rica en el Mundial que ha costado 10 millones (él cobrará dos por el traspaso). En el Madrid sabe que la exigencia será máxima, pero Keylor desvela una de las claves del éxito: «Uno tiene que estar concentrado durante todo el partido. Cuando uno se mantiene con confianza el balón que llegue lo va a parar». No se refería en concreto, aunque lo pareciese, al estado anímico de Casillas.

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