Borrar
El Eintracht rubrica otra debacle europea del Barça
Cuartos / Vuelta

El Eintracht rubrica otra debacle europea del Barça

El equipo alemán jugó como en casa, pasó por encima de los de Xavi en el Camp Nou y se impuso por 2-3 en una noche de terror azulgrana

daniel panero

Jueves, 14 de abril 2022, 00:17

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El Barça tiene hoy en el Camp Nou una auténtica final a noventa minutos contra el Eintracht de Fráncfort. El conjunto que dirige Xavi recibe en casa a un equipo que ya sabe lo que es hacer sufrir a los blaugranas y que viaja a la ciudad condal con la meta de dar el gran golpe para pasar la eliminatoria y acceder a las semifinales de la Europa League. Los culés necesitan ganar sí o sí, no hay más cuentas, para mantener vivo el objetivo de hacerse con el título más probable este curso toda vez que el Real Madrid sigue intratable en Liga.

«Esto es el Barça. Tenemos la obligación de ganar y jugar bien. Para ellos es el partido más importante de su historia. Nosotros tenemos que igualar su intensidad y deseo», afirmó Xavi en la previa al partido que medirá a su equipo frente al Eintracht. El técnico de Tarrasa sabe que tiene una auténtica final en el Camp Nou frente a un rival que no admite relajaciones y da la receta para no pasar tantos apuros como en la ida. «Tenemos que mejorar las pérdidas, que ellos aprovechan para salir rápido. Hay que minimizar las contras y defender más con la pelota. Tenemos que competir mejor», añadió.

Xavi trata de mantener alerta a un equipo al que en los últimos compromisos le está costando sacar los partidos adelante. El Barça tuvo la pasada semana ante el Eintracht y el Levante dos avisos que no acabaron en tragedia pero que han hecho reaccionar al técnico catalán. En ambos encuentros su equipo tuvo demasiadas pérdidas de balón y concedió mucho a dos rivales con armas para hacer daño al contragolpe, un error que los culés deberán cuidar si no quieren sufrir ante un rival que se mueve como pez en el agua en esos parámetros.

Para certificar el pase a semifinales, Xavi no podrá contar por lesión con Sergi Roberto, Samuel Umtiti, y Ansu Fati, futbolista que ya ultima la fase final de su recuperación y podría reaparecer en los próximos encuentros, y tampoco podrá hacerlo con Dani Alves, no inscrito en la competición. La buena noticia para el egarense es que recupera de una tacada a Gerard Piqué, Memphis Depay y Sergiño Dest, tres jugadores que acarreaban problemas físicos y que ayer ya entrenaron con normalidad con el resto del grupo. El regreso de estos futbolistas condicionará un once en el que el Barça pondrá toda la carne disponible en el asador y en el que apenas hay dudas en la zaga. Sergiño Dest y Araujo se disputan el carril diestro, mientras que Piqué podría reaparecer en el eje central. Arriba no habrá sorpresa, la medular sería para Busquets, Pedri y De Jong y el tridente de ataque lo conformarían Ferran Torres, Aubameyang y Dembélé. La cita, crucial, no admite experimentos ni rotaciones.

Peligro en las transiciones

No será un partido sencillo para el Barcelona. El Eintracht ya sabe cómo buscarle las cosquillas a los blaugranas y repetirá un planteamiento similar al del encuentro de ida, tratando de achicar los espacios y buscando la velocidad en las transiciones. Así hicieron daño en Alemania y la consigna será similar en un Camp Nou hasta la bandera, consciente de que no será un paseo. Los germanos siguen sin convencer en la Bundesliga, perdieron el pasado fin de semana 1-2 ante el Friburgo y son novenos, pero en la Europa League la historia es bien distinta. Los de Oliver Glasner han ganado a domicilio tres de los cuatro partidos que han disputado este curso y se sienten capaces de lograr el más difícil todavía ante uno de los favoritos al título.

Para ello, Glasner tendrá que sobreponerse a la ausencia por sanción de Tuta, un futbolista capital en el engranaje defensivo del Eintracht. La baja del defensa brasileño es la única junto a la ya habitual de Diant Ramaj, lesionado de la rodilla que no pudo estar en el encuentro de ida. Los germanos podrían ensayar de nuevo en el Camp Nou ese sistema camaleónico que tanto daño hizo a los de Xavi con tres centrales, con el veterano Makoto Hasebe como novedad, seis centrocampistas con mucho ida y vuelta y un solo punta. Contrarrestar este dibujo será el primer gran reto para el Barça si quiere estar en semifinales de la Europa League.

El Barça se la pegó contra el Eintracht en la Europa League. El conjunto que dirige Xavi revivió las pesadillas europeas vividas frente al Liverpool, PSG, Juventus o Roma y disputó uno de sus peores partidos desde la llegada del técnico de Tarrasa. Los culés se vieron superados en todo momento por los germanos y Kostic en dos ocasiones y Santos Borré en una certificaron una eliminación que acerca al Camp Nou el fantasma de una temporada en blanco que cada vez está más cerca. Los goles de Busquets y Memphis Depay, ambos en el descuento, decoraron un marcador que pudo ser más abultado.

Como si jugara de local. Así salió el Eintracht de Fráncfort a disputar el partido de vuelta contra el Barça. El Camp Nou recibió la llegada masiva de hasta 20.000 alemanes dispuestos a arropar a los de Oliver Glasner. El aliento lo notó un equipo que salió lanzado, con una presión asfixiante arriba, dispuesto a incomodar la salida de balón de los de Xavi y con la misión de golpear primero. Dicho y hecho. El Eintracht sorprendió y en apenas dos minutos hizo tambalear a unos culés que cayeron en la trampa. Eric García derribó a Lindstrom en el área y puso a Kostic a once metros de la meta de Ter Stegen. El serbio no perdonó y colocó la primera piedra para los blaugranas en el camino a semifinales.

El tanto inicial de Kostic fue solo eso, la primera piedra. El Barça, que salió sin Piqué por lesión, se hizo con las riendas del partido, o eso creía, y comenzó a percutir desde los extremos con un Ousmane Dembélé muy activo. Fue un señuelo del Eintracht. Los germanos esperaban y salían al contragolpe con una velocidad endiablada que era incontrolable para el Barcelona. Kostic, Knauff y Jakic pusieron de manifiesto la fragilidad culé y avisaron antes de que Santos Borré prendiera la mecha con la traca final. El colombiano recibió, se giró sin oposición y soltó un latigazo a la escuadra para cerrar una primera parte terrorífica para un Barça incapaz de maniatar a un rival crecido que se sentía capaz de todo.

Barcelona

Ter Stegen, Mingueza (Dest, min. 62), Araujo, Eric García (Luuk de Jong, min. 70), Jordi Alba, Pedri (Frenkie de Jong, min. 46), Busquets, Gavi, Dembélé, Aubameyang (Adama, min. 62) y Ferran Torres (Memphis, min. 80).

2

-

3

Eintracht

Trapp, Touré (Hasebe, min. 99), Hinteregger, N'Dicka, Knauff (Chandler, min. 99), Jokic, Rode (Hrustic, min. 80) Kostic, Lindstrom (Hauge, min. 80), Kamada y Borré (Ache, min. 91).

  • Goles: 0-1: min. 4, Kostic, de penalti. 0-2: min. 36, Santos Borré. 0-3: min. 67, Kostic. 1-3: min. 91, Busquets. 2-3: min. 101, Memphis, de penalti.

  • Árbitro: Soares Días. Amonestó a Eric García, Jakic, Gavi, Hrustic, Dembélé, Knauff, Glasner, Trapp y expulsó a N´Dicka.

  • Incidencias: Partido de vuelta de cuartos de la Europa League disputado en el Camp Nou ante 80.000 espectadores.

El descanso sumó otro problema más para Xavi. Pedri se tuvo que retirar por lesión y su lugar lo ocupó Frenkie de Jong. La entrada del neerlandés no mejoró los problemas de un Barça que solo era capaz de inquietar a los de Glasner con las acometidas de un Dembélé que lo intentó de todas las maneras posibles. El galo fue la única alternativa para inquietar a los germanos y un balón suyo pudo cambiar el curso del partido si Aubameyang hubiera estado preciso en el remate. No lo estuvo y dejó pasar la ocasión más clara para recortar distancias.

El gol no llegaba y Xavi pasó al ataque agitando la coctelera. Dio entrada a Dest, Adama Traoré y Luuk de Jong pero no era el día. Los cambios, lejos de dar empuje a los blaugranas, hicieron más grandes las carencias de un Barça al que no le salía nada. El Eintracht olió una vez más las dudas y aprovechó para dar el último golpe. Kamada recibió en el desierto en la medular blaugrana para habilitar a Kostic y dejar al serbio listo para fusilar el tercero, el definitivo, el que cerraba una noche trágica para un culé que además tuvo que compartir asiento con su verdugo. El Camp Nou, que vivió aún sin demasiada esperanza los goles estériles de Busquets y Memphis Depay sobre la bocina, parecía el Oktoberfest con 20.000 alemanes cantando al ritmo de un equipo que se dio un homenaje en el Camp Nou y que acerca a Can Barça el fantasma de la temporada en blanco.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios